Los naipes podrían comenzar a derrumbársele al mandamás de Movimiento Ciudadano, Dante Delgado, en gran parte por la “estrategia” política que ha emprendido durante los últimos meses. El autodescarte de Samuel García como posible presidencial naranja para 2024, las crecientes posibilidades de que Luis Donaldo Colosio busque la reelección en alcaldías de Monterrey (o un escaño del Senado), y la distancia que ha marcado el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, podrían dejar a MC con un perfil con suficiente fuerza para participar en la contienda de 2024. En este espacio adelantamos que había muchos emecistas que no estaban conformes con la forma en que Dante estaba llevando las riendas del partido, y aunque ha habido cuestionamiento a directo como en otros partidos, se comienza a notar cierta división. ¿O será acaso la intención de Delgado que MC tampoco compita en la presidencial?A ver qué pretexto pondría ahora.
El número dos
Vaya predicamento que podría enfrentar el sucesor de Adán Augusto López Hernández como secretario de Gobernación, cuando se confirme su licencia al cargo. Y es que por un lado, el nuevo “número dos” tendrán gran peso político para el cierre del sexenio y muchos reflectores. Pero por el otro, asumiendo este cargo queda prácticamente descartado para competir por algún otro puesto de elección popular, pues el propio presidente López Obrador ya anunció que con los cambios que se esperan en el gabinete, así pretende terminar su Gobierno. Eso sí, nos comentan que justamente cuando dé a conocer el nombre, también podrá adivinar si Morena ya proyectó negociar con sus aliados para que encabece la candidatura en alguna de las gubernaturas en juego el próximo año, quizá en el sur del país. ¿Será nombramiento y, a la vez, descarte y vía libre?
Las ventajas de Rutilio
El gobernador Rutilio Escandón tiene algunas ventajas sobre sus homólogos, no son muchas, pero las tiene. Es del partido del presidente, es protegido del presidente y del secretario de Gobernación, y párele de contar. Si no fuera por ello y por el apoyo que le ha dado la Federación, quién sabe lo que sería Chiapas en materia de seguridad en este momento, lo que es mucho decir. Y ya no hablemos de otros indicadores como pobreza, empleo o cobertura en salud, porque no solo no ha avanzado el estado en el sexenio de Escandón, sino que ha retrocedido.