En su reciente visita a tierras jaliscienses, uno de los mensajes más celebrados que dio la futura candidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum Pardo, entre los militantes de ese partido, fue que el hecho de ser fundador o fundadora de ese movimiento no le confería a nadie ningún tipo de calidad superior con respecto a aquellos que se sumaron con posterioridad.
Ahora se sabe que en el centro de exposiciones llamado Palacio de la Cultura y los Congresos (Palcco), en el que Sheinbaum Pardo tuvo un encuentro multitudinario con militantes y figuras destacadas morenistas como presidentes municipales, legisladores locales y federales, ediles, así como consejeros estatales y otras autoridades partidistas, la lideresa señaló:
“Hoy todos somos del movimiento, compañeros y compañeras: los que lo fundamos, pero los que llegaron hace dos años, los que llegaron hace tres, nada de que aquí hay ´pedigrís´ porque eres fundador, no”.
Apenas concluyó esa frase y el auditorio reventó en vítores hacia Sheinbaum Pardo, quien tuvo que hacer inclusive una pausa en su discurso mientras los presentes lanzaban los clásicos gritos de: “¡presidenta, presidenta!”, según puede escucharse.
La efusividad de la reacción evidencia que la futura candidata presidencial tocó con sus palabras un tema verdaderamente sensible entre los morenistas jaliscienses, quienes, por lo visto, estarían teniendo como uno de sus principales motivos de división y disputa el hecho de que una parte de los mismos se asumen con derechos y privilegios especiales por tener una mayor trayectoria entre los seguidores de Andrés Manuel López Obrador.
Sin divisiones
Sheinbaum Pardo les advirtió también que en las zonas del país donde aún no gobierna Morena “es justamente donde se dan las mayores divisiones, ‘que si no fuiste tú; que si no fui yo’, un encono tremendo por tener un encargo público, pero para que eso no ocurra pues tenemos una gran responsabilidad”, dijo.
Un mensaje como ese que apela a la integración y unidad de los militantes, sin importar en qué momento se sumaron al movimiento, sin duda que beneficia a figuras que han adquirido fuerza recientemente en el partido, como es el caso del diputado, José María Martínez Martínez, uno de los principales aspirantes a la gubernatura, aunque con un pasado panista.