La postura aislacionista que prevalece por parte del dirigente nacional de Movimiento Ciudadano, Dante Delgado Rannauro, ante la posibilidad de que ese partido se pudiera sumar al Frente Amplio por México, ha hecho que el foco de atención salga del espacio naranja para trasladarse ahora a la próxima reunión que sostendrán Enrique Alfaro Ramírez y la senadora, Xóchitl Gálvez Ruiz.
En efecto, está levantando mucha expectación el encuentro que estaría pactado entre el gobernador de Jalisco y la aspirante por la candidatura presidencial del Frente Amplio por México, para este próximo jueves, y donde podrían darse los primeros visos de una alianza entre el alfarismo y esa coalición de partidos, más allá de los designios de Delgado Rannauro.
Para todos aquellos que están interesados en que se conforme un bloque opositor sólido que resulte competitivo en la elección presidencial de 2024 ante la ola morenista, va quedando claro que el diálogo que podría resultar fundamental para ello es el que entablarán Alfaro Ramírez y Gálvez Ruiz, y ya no, por el contrario, el que se ha venido desarrollando al interior de Movimiento Ciudadano, donde todo indica que Delgado Rannauro no modificará ni un ápice su negativa a tal alianza.
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Apenas este 18 de agosto, Delgado Rannauro, planteó en sus redes: “Es un error que las fuerzas tradicionales insistan en una estrategia que ya han rechazado las y los ciudadanos en veintitrés ocasiones, porque son los partidos de la vieja política los que ya le fallaron a México. Eso es lo que rechaza @MovCiudadanoMX, por ello, rumbo a 2024, nuestra única alianza es y será con las y los ciudadanos”.
Sin embargo, y como ha quedado claro dentro y fuera del partido naranja, las riendas de la aceitada maquinaria emecista en Jalisco están en manos únicamente de Alfaro Ramírez, por lo que el futuro del bloque opositor podría estar dependiendo mucho más de lo que se decida en este primer acercamiento entre el mandatario y la senadora, que de la ruta política que le ha impuesto Delgado Rannauro a la fuerza política que encabeza.
Se recordará que el 10 de julio pasado, justo después de anunciar que no buscaría la candidatura presidencial por Movimiento Ciudadano, Alfaro Ramírez se expresó así de la senadora, Xóchitl: “tengo la mejor impresión de ella, es una buena mujer, es una buena política, me cae muy bien y creo que le ha dado una sacudida al tablero político nacional“.
Ese mismo día, el gobernador dejó en claro que el alfarismo podría aliarse, por decisión propia, para la elección presidencia. Por todo ello, el encuentro Alfaro-Xóchitl podría tratarse de un punto de inflexión para la consolidación del bloque opositor en México.
