Las investigaciones que está llevando la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo, a cargo de Santiago Nieto Castillo, por el desvío de recursos públicos por parte de funcionarios del sexenio de Omar Fayad Meneses, deben tener cada vez más intranquilo al exgobernador. Y es que poco a poco parece que se va cerrando la pinza. Después de la detención y vinculación a proceso del exoficial mayor de Hidalgo y que se haya conocido que también se investiga a la exsecretaria de Finanzas, Jessica Blancas (aunque los detalles se mantienen con mucha reserva), parece que el fuego se acerca cada vez más al exmandatario. Después de algunas semanas en las que tanto se habló de la posibilidad de una embajada y más recientemente en un posible desembarco a MC tras su renuncia al PRI, parece que Fayad no resulta un buen compañero político, y ahora mismo se encuentra en la banca.
Rocha ni los ve ni los oye
Absorto en sus enfrentamientos políticos, al gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, se le puede venir una importante crisis de gobernabilidad. La problemática del desplazamiento forzado en la entidad, ante la ola de inseguridad que se vive en ciertos territorios es más que evidente y continúa agravándose, por lo que resulta incomprensible como la primera reacción del gobierno de Rocha, después de que más de 60 familias abandonaran sus hogares en la zona serrana haya sido asegurar que no había indicios de violencia en la zona. Ahora, al menos en el discurso se está atendiendo a las familias, pero todo esto que ha ocurrido es otro signo más de la fallida administración de Rocha.
El silencio de Fox
Llama la atención que desde el pasado 21 de julio, día en que publicó una disculpa por sus comentarios xenófobos, el presidente Vicente Fox no ha tenido actividad en su cuenta de X (antes Twitter), donde usualmente era activo. ¿Será una decisión personal? O, como se comenta, hubo una enérgica recomendación a que se moderara para que no afectara el proceso del frente opositor.
