El excanciller Marcelo Ebrard no avanzó realmente mucho en su postura respecto a su futuro político durante su mensaje del día de ayer, pues si lo que se esperaba era que definiera si sigue o no en Morena o si buscará la candidatura por Movimiento Ciudadano, tal parece que esa respuesta no llegará próximamente. De momento lo que permanece es la ambigüedad, que, nos dicen, podría ser una forma de ganar tiempo por parte de Ebrard, que no vería muy seguro un desembarco a las filas naranjas por el posible rechazo que generaría su llegada y más si entra directo a la competencia por la candidatura. Pareciera que a la dirigencia emecista tampoco le corre prisa, pues primero parece que tendrían que tratar de resolver las diferencias internas, que hoy los mantienen en la incertidumbre respecto a su participación en el proceso electoral. Habrá que ver qué tanto se puede estirar la liga.
Se desmarcan de Cuevas
El anuncio de la alcaldesa de Cuauhtémoc, Sandra Cuevas, de que próximamente se separará del cargo para enfocarse en buscar la candidatura a la jefatura de Gobierno, nos comentan, no altera en nada la ruta del Frente Amplio por México en la capital del país. Y es que, nos hacen ver, no es la apuesta ni del PRD capitalino, ni mucho menos del PRI o del PAN. Así que por lo que nos comentan, no se toma muy en serio lo que anuncie Cuevas Nieves, ni el papel que realmente quiera jugar en las elecciones del siguiente año.
Quejas infundadas
Cierto es que el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2024 puede ser cuestionado y podría mejorarse, pero quien sí se “voló la barda” fue el gobernador de Coahuila, Miguel Riquelme, pues ya salió a quejarse de que la entidad “vuelve a ser castigada”. Habría que recordarle a Riquelme que bajo su administración, Coahuila ha tenido observaciones millonarias por el uso de recursos federales por parte de la Auditoría Superior de la Federación, muchas de las cuáles, por cierto, no han sido solventadas. ¿Con qué cara?
