Redes de poder: Ayuda inesperada para el PRI

El empujón final para que el PRI buscara llegar a la presidencia de la Mesa Directiva de San Lázaro vino de un aliado que no se tenía previsto, el PRD. Durante los últimos días los pronósticos ponían al Partido Verde como el favorito para ceder legisladores, aunque tampoco se descartaban el PES o hasta el PAN, que habían dejado entrever la posibilidad de “prestar” diputados al PRI, con tal de que se mantuviera el acuerdo fundacional. Este movimiento del Sol Azteca tiene todo el sello de una operación del recién electo presidente nacional Jesús Zambrano, además, mantiene vigente la posibilidad de una alianza entre priistas y perredistas rumbo a 2021, un camino que ya había empezado a pavimentar el anterior dirigente Ángel Ávila.

El PT tendrá que ceder

Tras la decepción de no llegar a la presidencia de la Mesa Directiva, el grupo parlamentario del PT en la Cámara de Diputados hizo patente su molestia al no proponer a ninguno de sus legisladores para integrarla, sin embargo, nos dicen, aún hay asuntos de su agenda política que le interesa sacar en el periodo ordinario, lo que los mantiene en la coalición con Morena, y sobre todo, los petistas saben que un rompimiento con la 4T los podría condenar a la extinción como partido.

Frágil alianza en Hidalgo

Más allá de las consecuencias judiciales del caso, la detención del presidente del Patronato de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, Gerardo Sosa, podría terminar con la frágil alianza del llamado Grupo Universidad y Morena. El grupo, liderado por Sosa, rompió su histórica vinculación con el PRI en Hidalgo para reforzar a la Cuarta Transformación en la entidad para las elecciones de 2018, de ahí que sus integrantes se quedaron con algunos puestos de elección clave, sin embargo, esta unión pragmática queda ahora a la deriva. Ambas partes pierden, sobre todo Morena, con elecciones a las alcaldías a la vuelta de esquina, y con muchos militantes descontentos por la forma en que se han definido algunas candidaturas. ¿Volverá el Grupo Universidad a los brazos del PRI?