Ni Súper Tigres… ni Súper Chivas

Pues resulta que nuestros dos súper equipos, las súper Chivas, que hace un par de meses festejaban allá en Guadalajara y en la Minerva y por todos lados ser nuevamente las Súper Chivas, y este es el campeonísimo, y esta es la nueva era y este es el nuevo Chivas, son las Súper Chivas les guste o no les guste, pues fueron a ser exhibidos desafortunadamente para su causa, por unos Rayados que ni siquiera tuvieron que emplearse a fondo.

Alfredo Domínguez Muro Alfredo Domínguez Muro Publicado el
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Pues resulta que nuestros dos súper equipos, las súper Chivas, que hace un par de meses festejaban allá en Guadalajara y en la Minerva y por todos lados ser nuevamente las Súper Chivas, y este es el campeonísimo, y esta es la nueva era y este es el nuevo Chivas, son las Súper Chivas les guste o no les guste, pues fueron a ser exhibidos desafortunadamente para su causa, por unos Rayados que ni siquiera tuvieron que emplearse a fondo.

Rayados fue más certero, anotó los goles en el momento adecuado y mire que el Guadalajara se había ido arriba con un magnífico en combinación de Pereira y Osvaldo Alanís apenas a los dos minutos, pero en la siguiente jugada Rayados responde y hasta ahí quedó Chivas.

El Monterrey recuperó la pelota, la tomó e hizo lo que quiso y terminó ganando 4-1 en un partido donde por cierto lo sorprendente es la expulsión por primera vez como director técnico de “El Pelado” Almeyda.

Al final del partido describe perfectamente bien la temporada de su equipo. “Somos un equipo que parece un sube y baja o mejor dicho un electrocardiograma en donde primero estamos en la punta y luego bajamos y subimos”, baja de consistencia para las Chivas, entonces aquellos que les dicen Súper Chivas, aguántense tantito.

¿Y LOS SÚPER TIGRES?

Y qué me dice de los Súper Tigres, que arrancaron la temporada comiéndose a puños la Liga MX, primero con las grandes contrataciones, manteniendo a la mayoría de sus grandes figuras, la máxima nomina del futbol mexicano y así le metieron 5 al Puebla y pudieron ser 9.

Pero desde entonces dos empatitos por ahí, y esta derrota que duele mucho porque es ante Pachuca, ¿por qué?, porque los Súper Tigres hay que recordarlo, no están en el Mundial de Clubes por haber perdido esa Final de Concachampions ante Pachuca hace unos meses.

Y este fin de semana jugando un partido de verdad bastante raquítico, sí, puede usted decir “mucho desgaste”, pero poco resultado a pesar de los nombrezotes que tiene Tigres en la cancha.

Por ahí si me apuran un poco, el gol que anota André Pierre Gignac, su primero de la temporada, es un penalti producto mucho más de un error de la defensa del Pachuca que un acierto de Tigres. Así es que tampoco tenemos Súper Tigres.

Y ya de los equipos “normales”, destaca por mucho la victoria del América ante el equipo del Atlas por una razón importante, porque el partido fue muy parejo, Atlas tuvo incluso para ganar y el partido se define primero por un error espantoso del Atlas, al fallar un penalti con esa chocante costumbre de querer tirarlo muy sobrado, al estilo Panenka, y luego llega Oribe Peralta, toma el balón cuando llega el penalti a favor del América en la última jugada del partido y anota.

Ahora América ya está peleando el súper liderato con el Monterrey.

Del Cruz Azul no hay mucho qué hablar, es el “equipo del agua tibia”, ni gana ni pierde, 0-0 con Toluca y ahora la frase del “Profe” Jémez, que cada semana nos sorprende con una nueva, es que “este es el mejor partido de su equipo”. Si este es el mejor, cómo estarán los peores.

Y ya de salida sin duda alguna el Pumas de la mano de “Nico” Castillo con este doblete, le pone un hasta aquí a los Lobos BUAP, aparte con un muy buen sentido estratégico el equipo de Pumas y los de “Rafa” Puente Jr. están ahora con los pies en la tierra y tendrán que pelear como todos en el torneo.

Así las cosas, pues, el único Súper de la jornada es sin duda  el Súper Real Madrid, que va a la cancha del Camp Nou y a base de descolgadas le mete 3-1 al Barcelona, en donde por cierto expulsaron a Cristiano Ronaldo más que por algún error cometido en la cancha, por su soberbia, se quita la camiseta y después finge un penalti y por si fuera poco empuja al colegiado… a ver las consecuencias.

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