Amigos de Monterrey y de la Zona Metropolitana, les tengo una noticia que debería ser (y debió haber sido) festejada en grande por las autoridades.
El Gobierno federal declaró como Área Natural Protegida al Parque Nacional Cumbres, que fue decretado como parque nacional en 1939.
Con ello, acabamos de ganar una importantísima batalla.
El Parque Nacional Cumbres originalmente tenía 340 mil hectáreas. Lo que queda hoy deben ser 130, 140 mil hectáreas. Cien de esas hectáreas están en un proceso de amparo, en un litigio, que vamos a ganar finalmente.
Aquí la noticia importante es que se prohíben dentro del Parque Nacional Cumbres los campos de golf, no habrá urbanizaciones, no habrá construcciones masivas, no se pueden extraer plantas, no habrá minería.
Pero sobre todo, se va a respetar la vocación de ser una zona protegida. Ya no será un botín para los voraces -no todos, pero muchos de los urbanizadores, de los juniors, de los cachorros de la revolución, que ya se “agandallaron” 100 hectáreas que están en amparo.
No son de ellos todavía. La lucha por la protección de este parque natural sigue.
