Ríspida y muy calientita estuvo ayer la comparecencia del fiscal anticorrupción, Ernesto Canales, en el Congreso del Estado.
El subprocurador dedicado a investigar al exgobernador Rodrigo Medina se confrontó con los legisladores locales que- a diferencia del encuentro con el procurador Roberto Flores – hoy sí enseñaron los dientes al funcionario del gobernador Jaime Rodríguez.
El diputado local del PAN, Arturo Salinas, fue de los más incisivos con el presidente de la agrupación Renace.
Sí, el mismo salpicado por el escándalo de los moches en el PAN quiso jugar al verdugo con Canales.
En su encuentro con los diputados, Canales aceptó –lo que no había querido aceptar- que recibió los 6 millones de dólares por parte de una de las exesposas de Emilio Azcárraga.
Pero según él fue un pago legal por concepto de los gastos relacionados con la defensa en el juicio de herencia.
Al final el diputado del PRI, Héctor García, lo confrontó verbalmente y le reclamó una supuesta amenaza de Canales hacia él.
La situación estuvo a casi nada de salirse del control.
FEB nada de muertito
Que en el gobierno de Nuevo León siguen esperando que Fernando Elizondo deje de nadar de muertito en el caso de Ernesto Canales.
Hasta el gobernador Jaime Rodríguez ya salió en defensa de Canales, pero no así Elizondo quien fue –junto con Femsa- quien lo recomendó para el puesto.
El titular de la Coordinación Ejecutiva de la Administración Pública ni siquiera metió las manos por Canales y dejó que los diputados legisladores se lo cocinaran ayer en la comparencia.
Elizondo no puede tapar el sol con un dedo: la exhibida a Canales es un golpe internamente para él y su grupo.
Hay vida después del #cobijagate
Lejos está Rogelio Benavides, exsubsecretario de Administración del Estado, de estar en la banca.
Benavides fue este fin de semana el anfitrión en su casa de la reunión que tuvo el gobernador Jaime Rodríguez con candidatos independientes de todo el país.
Benavides se ha juntado con Guillermo “Memo” Rentería en el negocio de brindar asesorías a los candidatos independientes que aspiran a convertirse en los nuevos “Broncos” de México.
Benavides demuestra que hay vida después del cobijagate y que el gobernador lo tiene como uno de sus operadores de confianza.
Movimiento Ciudadano se desmantela
El partido Movimiento Ciudadano en Nuevo León sigue desmantelándose y quedándose sin cuadros prometedores.
El que ayer se sumó a la ola de renuncias que aqueja a este partido político fue el joven Óscar Tovar Sánchez, excandidato a diputado federal por MC.
En sus cuatro años de militancia Tovar Sánchez estuvo como dirigente juvenil e incluso como vocero de este partido.
En su mensaje de renuncia asegura que en el partido que encabeza Pilar Lozano en Nuevo León no existen áreas para poder impulsar los cambios que se necesitan en Nuevo León.
La salida de Tovar Sánchez –surgido del grupo Kibernus, patrocinado por el Grupo Salinas- se suma a la de Jorge Blanco, así como la de su hermano Jesús Blanco.
