No, pero sí

Después de que se hizo público que el cuñado de Felipe Calderón cobra más de 76 mil pesos en el Senado de la República, pareciera que el pánico les nubló la mente a Ernesto Cordero y calderonistas asociados.

Y es que con tal de demostrar que Ignacio Zavala no cobró como asesor de la bancada del PAN, Ernesto Cordero terminó admitiendo ayer que Zavala sí cobra, pero como su asesor en la presidencia del Senado.

Para acabar de empeorar la situación, al excoordinador de la bancada del PAN y presidente del Senado, se le ocurrió la puntada de justificar el donativo mensual diciendo que “Juan Ignacio Zavala es un muy respetable consultor” que asesora a la presidencia del Senado en materia de comunicación política.

Así como dijo una cosa, dijo la otra

Ernesto Cordero ya tiene un competidor respetable en el difícil arte de desmentirse a sí mismo. Se trata nada más y nada menos que su sucesor en la coordinación en la bancada.

Y es que después de que Jorge Luis Preciado señaló públicamente al vicecoordinador panista Jorge Lavalle como el autor de la distribución no autorizada de 16 millones de pesos entre los senadores panistas, unas cuantas horas después se desdijo públicamente de su acusación.

Delante de Jorge Lavalle, Preciado salió con que todo fue un error de comunicación, pero que sigue sin saber quién autorizó la entrega de 430 mil pesos a cada Senador panista.

Sin embargo, admitió que eso no obsta para que los senadores se queden con el dinero, siempre y cuando lo comprueben.

A pesar de todo, lo que el coordinador de la bancada no aclaró son dos cosas:

La primera es si los senadores podrán justificar el gasto con recibos de honorarios por asesoría, emitidos por Nacho Zavala.

Y la segunda, si restituirá en su cargo al vicecoordinador administrativo Jorge Lavalle, a quien destituyó por la desmentida distribución no autorizada.

Destitución de mentiritas

Haciendo gala de cinismo que ya empieza a ser característico de maderistas y calderonistas, el coordinador Jorge Luis Preciado destituyó de mentiritas y tan solo “por dos días” al vicecoordinador Francisco Domínguez.

La chicana tiene el propósito de dejar sin validez legal el acuerdo que habría de tramitarse hoy, por parte de la mayoría calderonista en la bancada, para quitarle el manejo del dinero al coordinador de Madero.

¿Y el espíritu de la ley?… Bien gracias.