No a libros de texto chafas
Acudiré ante la UNICEF a solicitar que, como autoridad internacional, intervenga para garantizar los derechos de nuestras niñas y niños.
Kenia LópezEl abandono del gobierno de Morena en materia educativa ha traído consecuencias catastróficas. Datos del INEGI señalan que en México, existen 24.8 millones de menores en edad escolar, sin embargo, más de 700 mil estudiantes no van a la escuela.
Aunado a estas preocupantes cifras, organizaciones como “Educación con Rumbo”, estiman que más de 1.2 millones de alumnos que se inscribieron al ciclo escolar 2022-2023, no continuaron con sus estudios y abandonaron la escuela.
Según las “Principales Cifras del Sistema Educativo Nacional” publicado por la SEP, a nivel nacional, por cada 100 estudiantes que ingresan a la primaria, 95 la terminan. De esos 95, 92 ingresan a la secundaria. De esos 92, 81 entrar a la preparatoria y 53 la terminan. De esos 53, 39 inician una licenciatura, pero sólo 26 la concluyen. En resumen, por cada 100 alumnos que ingresan a la primaria, sólo 26 terminan una licenciatura.
Esta situación se agrava en entidades federativas como Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Veracruz y San Luis Potosí, donde menos de 20 alumnos culminan sus estudios profesionales.
La estrategia educativa de Morena es un caos. Y hoy, el presidente López Obrador quiere adoctrinar a las siguientes generaciones mediante los nuevos libros de texto gratuito. Lamentablemente, los está condenando al rezago y a la falta de herramientas para tener un mejor futuro
Hemos revisado los libros que se les entregarán a los alumnos, así como al personal docente y es una vergüenza lo que el gobierno puso en esas páginas.
Hay información falsa con sesgos ideológicos. En el texto “Un libro sin recetas para la maestra y el maestro” fase 6, uno de los apartados se titula “Las raíces podridas del neoliberalismo educativo”. Aquí la SEP descontextualiza los hechos y la historia de manera partidista e ideológica.
O en el libro de primero de primaria “Proyectos comunitarios”, desinforman sobre el Covid, priorizando tomar tés por encima de los medicamentos que, por ejemplo, sí recibió el presidente López Obrador con médicos y hospitales de primer nivel. Para el pueblo de México quieren tés de perejil y orégano, pero los privilegiados del gobierno de Morena usaron Remdesivir y medicamentos especializados. Así el doble discurso de este gobierno.
Es por lo anterior que acudiré ante la UNICEF a solicitar que, como autoridad internacional, intervenga para garantizar los derechos de nuestras niñas y niños.
Este Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia es un referente internacional de prestigio que defiende los derechos de la niñez, más allá de colores partidistas o regímenes en turno. Por ello, esperamos que ante esta crisis educativa que México enfrenta, pueda fijar una posición y así se detenga el uso de estos libros de texto que claramente son una cartilla de propaganda ideológica.