Además del fuero del que gozaban los integrantes de las cámaras alta y baja, los diputados y senadores, cuando pueden, hacen de la suyas sin que nadie haga algo o denuncie nada, en la más alta tribuna del país.
Los que saben, precisan que un legislador de la Cámara baja, mensualmente gana 170 mil pesos… Recién se denunció que por vales de supermercado, en el Palacio Legislativo de San lázaro, se reparten anualmente 150 millones de pesos.
Que, además, si a alguien se le ocurre mandarles un regalito (por ejemplo una iPad), nuestros diputados los reciben si tomar en consideración que su voto ya está siendo condicionado de alguna manera. De esto, el perredista Silvano Aureoles, como los mariachis, se calló.
Que el tráfico de influencias en la otrora casa del pueblo (léase Cámara baja o alta), era una costumbre que ahora es una ley no escrita en nuestra Carta Magna.
Los ejemplos son claros y fehacientes:
Lerdo de Tejada-Godina Lobbyng México S. A., de C.V., es una corporación propiedad de dos exdiputados federales del Partido Revolucionario Institucional. Sebastián Lerdo de Tejada, fue representante del PRI en el Instituto Federal Electoral. El poblano Luis A. Godina, es priista, a secas.
Que estos dos personajes quisieron “bajarle” 115 millones de pesos, de buenas a primeras, al presupuesto del legislativo, so pretexto de un negocio, que no pasa de los 500 mil pesos. Al final el fraude millonario se vino abajo.
Dicen que hoy empiezan a hacer negocios juntos en el ISSSTE. A esto por ahí lo conocen como la selección natural de la especies.
Platican que en este negocio, fraude o intento de, estuvo involucrado el militante de Acción Nacional Humberto Aguilar, exsenador y exsubsecretario de Gobernación.
En San Lázaro todavía recuerda a la maestra Elba Esther, quien como coordinadora de la bancada tricolor regaló más de 300 laptops. Esto ocurrió en la ciudad de Puebla.
O cuando Guillermo Jiménez Morales, como presidente de la Gran Comisión de la Cámara de Diputados, regaló a todos los legisladores un Rolex de acero, con su respectivo nombre.
El fuero legislativo se eliminó, pero con él o sin él, los abusos persisten.
En Senado de la República apenas el 11 de marzo anterior, sus ocupantes se autorizaron más de 47 millones de pesos para la adquisición de vehículos.
Que se tenga conocimiento, por este abuso, ni Cordero ni Camacho ni Bartlett ni la Barrales ni la Sansores ni la Padierna ni el porro Javier Lozano, se opusieron. Tampoco se opuso Gil Zuarth y mucho menos Gamboa Patrón.
Miguel Barbosa, como senador perredista, simplemente aceptó o aceptará el vehículo de marras.
El senador Raúl Cervantes Andrade, llama la atención. Pocos saben que este legislador ha sido abogado de industrias reguladas en los sectores del autotransporte, aviación, telecomunicaciones, energía, satélites, agua, ferrocarriles y medioambiente. En algunas empresas de dichas industrias es miembro del Consejo de Administración. Asimismo, ha sido vicepresidente de cámaras empresariales y miembro de algunas confederaciones de cámaras.
¿Hay o no tráfico de influencias con este legislador? ¿Hay o no conflicto de intereses en el caso Cervantes Andrade?
Tríada Camacho-Ebrard-Mancera
Últimamente se ha hablado de que la señora Elba Esther Gordillo, está bien atendida en la torre del penal de Tepepan. También han denunciado que goza de todos los privilegios de los que, no debe tener un reo o convicto.
Para entender el caso de la “guerrera” magisterial, hay que recordar que en 1989 ésta fue inventada por Manuel Camacho Solís y, en ese entonces, tenía como fiel escudero a Marcelo Ebrard, que a la postre y en el mejor momento de la maestra, harían una mancuerna diabólica.
Uno, desde el gobierno de la ciudad de México (aquí entra en escena el que fuera procurador del DF y, gracias a los buenos oficios de Ebrard, se convirtió en candidato y, después, en jefe del gobierno de la capital del país, Miguel Ángel Mancera) y, la otra, como dirigente magisterial, hicieron una peculiar mancuerna y, en unidad, obtuvieron beneficios políticos.
Con este tipo de amarres, Gordillo Morales, no tuvo problema para quejarse de uno que otro achaque que, en los últimos años, especialmente con el PAN en Los Pinos, nunca tuvo. De ahí que a nadie extrañó que, de pronto, pasara de la cárcel de Santa Martha Acatitla a la torre del penal de Tepepan, donde, dicen los que saben, es tratada como reina.
Al final, la triangulación Camacho-Ebrard-Mancera, funcionó y Elba Esther, bien gracias.
El presidente de la CNDH, Raúl Plascencia, envió visitadores, pero han sido como la justicia y no han visto nada de nada.