Morena y el “cochinito” de Sheinbaum
La aprobación del nuevo sistema de justicia laboral, que prometía justicia pronta para los trabajadores, ahora se ve socavada por el mismo partido que la votó
Josefina Vázquez MotaEn un acto que deja en claro el desprecio de López Obrador por los derechos laborales y la justicia en México, Morena y sus aliados han perpetrado un verdadero robo a los trabajadores del Poder Judicial. Han optado por un camino motivado por la venganza.
El Poder Judicial ha demostrado estar del lado de las personas y no de los caprichos de un solo hombre, por ello ha sido atacado de manera directa con la decisión de robarles el dinero de 13 fideicomisos.
No se trata simplemente de dinero; es un acto de venganza que tendrá consecuencias devastadoras para los justiciables, ciudadanos y ciudadanas que buscan justicia en un país ya de por sí ensangrentado por la violencia del crimen organizado.
El discurso político enmascarado como “la eliminación de privilegios” no es más que una cortina de humo. La realidad es que se están destruyendo fideicomisos esenciales, como el destinado a la salud de los trabajadores judiciales, poniendo en riesgo la vida de quienes buscan justicia penal y laboral.
Este acto irresponsable no solo afecta a los trabajadores, sino también a las madres en busca de pensiones para sus hijos en un juicio, o a las mujeres que han sufrido violencia y buscan justicia en el Poder Judicial.
La aprobación del nuevo sistema de justicia laboral, que prometía justicia pronta para los trabajadores, ahora se ve socavada por el mismo partido que la votó. La destrucción de fideicomisos destinados a la capacitación de jueces y la mejora de las instalaciones judiciales demuestra una falta de compromiso con la justicia en todos los niveles.
El robo para Morena, lamentablemente, parece ser una estrategia recurrente en su búsqueda de consolidar el poder. Este actuar no es nuevo; en 2020, Morena eliminó 109 fideicomisos que desempeñaban roles cruciales en el desarrollo científico, tecnológico, cultural y en la reconstrucción posterior a desastres naturales, cuyos fondos también fueron saqueados.
Es necesario decir ¡basta! Los mexicanos merecen un gobierno que defienda sus derechos y no que los robe. El voto de Morena ha decepcionado a aquellos que creyeron en la promesa de un México mejor. La esperanza ahora está en manos de aquellos que luchan por la justicia y la integridad, mientras el “cochinito” de Sheinbaum se llena con dinero robado.