México, país de fiscalías y comisiones

“Cuando quiero que un asunto no se resuelva, lo encomiendo a un comité” (en nuestros tiempos modernos, serían una comisión o una fiscalía), dijo Napoleón Bonaparte.

Por ello, cuando surge un caso como el de Oceanografía, en la Cámara de Diputados y la de Senadores se propuso la formación de una Comisión Investigadora. Esta es la segunda, pues hace varios años Jesús González Schmall encabezó la primera para indagar a los hermanos Manuel y Jorge Bribiesca Sahagún, así como al tío Memo.

El Faraón El Faraón Publicado el
Comparte esta nota

“Cuando quiero que un asunto no se resuelva, lo encomiendo a un comité” (en nuestros tiempos modernos, serían una comisión o una fiscalía), dijo Napoleón Bonaparte.

Por ello, cuando surge un caso como el de Oceanografía, en la Cámara de Diputados y la de Senadores se propuso la formación de una Comisión Investigadora. Esta es la segunda, pues hace varios años Jesús González Schmall encabezó la primera para indagar a los hermanos Manuel y Jorge Bribiesca Sahagún, así como al tío Memo.

Hace muchos años, en septiembre de 1993, al conmemorarse el 25 aniversario de la masacre de Tlatelolco en 1968, se instaló una Comisión de la Verdad. Los resultados hasta ahora han sido poco suficientes e insatisfactorios.

Fox, en el 2004, amenazó a la SCJN de crear una Comisión de la Verdad sobre este mismo caso. Todo quedó en promesa.

Después del atentado en el que murió Luis Donaldo Colosio, se formó una Comisión Independiente, que más tarde fue disuelta por sus cinco miembros (Agustín Basave, Carlos Payán, Leonel Godoy, Agustín Santamaría y Fernando Gómez), porque no contaron con acceso a las investigaciones ni sustento jurídico. Esto ocurrió en junio de 1994.

Hay otras figuras similares que nacen en el seno oficial para dar profunda certeza a la sociedad mexicana y, en consecuencia, credibilidad a los gobiernos.

Un ejemplo es o fue la Fiscalía Especial que investigó el atentado en el que murió el entonces candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio.

A fines de 1994, a raíz de la muerte de José Francisco Ruiz Massieu, se creó otra Fiscalía Especial que fue dirigida por Mario Ruiz Massieu.

También tenemos una Fiscalía Especial para Atención de los Delitos Cometidos Contra la Libertad de Expresión, la cual depende de la Procuraduría General de la República. De su labor, los resultados de la misma están a la vista. 

Apenas el pasado 18 de marzo el pleno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), aprobó por unanimidad la integración de la Comisión Especial que investigará las fallas en la Línea 12 del Metro, la cual será presidida por el diputado Jorge Gaviño. 

¿Alguien espera buenos resultados?

En la Ciudad de México los capitalinos están “protegidos” por una Fiscalía Especializada Anti-Secuestros. ¿Realmente funciona y protege? 

La sociedad cuenta con una Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales. Con este gran instrumento, el “mapachaje” y los “ingenieros” electorales, son un “mito genial”.

Hay otra fiscalía con la Especialidad en Delitos Cometidos por Servidores Públicos. 

Con este nuevo mecanismo desde hace tiempo en las oficinas del  Gobierno del Distrito Federal, no hay “mordidas” ni “coyotaje” y muchos menos soberbia y prepotencia de los servidores oficiales. 

A su vez, la PGR tiene una Fiscalía Especializada para el Combate a la Corrupción. Nadie podrá negar que con este instrumento la corrupción y la impunidad en México “sea otro mito genial”.

El recuento de fiscalías es un poco largo, como largos son los cuentos de que con decretos, comisiones, comités y/o fiscalías se abatirán los problemas nacionales y México se convertiría en sucursal del paraíso. 

De ahí que de los casos de Oceanografía-Amado Yáñez; Luis Armando Reynoso Femat, Humberto Moreira, Tomás Yarrington, Gastón Azcárraga y Andrés Granier Melo, entre otros, se conviertan en la excepción que confirme la regla.

Pero, saltan los asegunes y hay dudas de que algunos de ellos lleguen a pisar la cárcel.

Qué tanto es tantito; siguen “Los Chuchos”

La mano que mece la cuna o lo que es lo mismo  “Chucho” Ortega, debería recurrir al Instituto Mexicano de Propiedad Industrial, IMPI, y al Instituto Nacional de Derechos de Autor, para oficializar que es propietario del PRD, junto con sus socios minoritarios, muy minoritarios, Jesús “Chucho” Zambrano y Carlos “El Titino” Navarrete.

Porque después de lo ocurrido en la reunión nacional perredista, se puede concluir que para comparsas y carnavales, solo los organizados por la izquierda que milita en el Partido de la Revolución Democrática.

Resulta que Jesús Zambrano Grijalva permanecerá hasta el próximo verano como presidente nacional perredista, porque así lo decidieron los consejeros nacionales de ese partido, quienes concedieron una prórroga a su mandato que había culminado el pasado 21 de marzo.

Qué tanto es tantito…

Con ello, buscan maniobrar para evitar que el ingeniero Cárdenas  llegue sin tocar baranda a la dirigencia nacional del partido del sol azteca.

En este asunto de cañerías de “Los Chuchos”, uno que juagará el papel clave será un personero llamado Carlos Navarrete.

Estos tres personajes de la izquierda nylon o von vivants, no quieren perder el partido por el asunto ideológico, sino que buscan seguir disfrutando las mieles que deja pegar con la izquierda y cobrar con la derecha. 

Con este leve tratan de cansar al Cuauhtémoc Cárdenas, que tiene intereses opuestos a los que hoy convirtieron al PRD en una verdadera empresa privada donde no se invierte un clavo, pero que es una mina de oro.

Dos Gustavo Madero y una reelección

Gustavo Adolfo Madero, junto con su hermano Francisco, luchó contra la reelección y por el  sufragio efectivo.

Gustavo A. Madero se enfrentó a la derecha mexicana de principios del siglo XX.

Durante la Decena Trágica, junto con Francisco I. Madero, Gustavo, enfrentó la rebelión de Félix Díaz, Bernardo Reyes, Victoriano Huerta, Aureliano Blanquet y Manuel Mondragón.

Lo que sigue es el parte histórico de la forma en cómo las fuerzas de la derecha de esa época asesinaron al ascendiente del que ahora aspira a reelegirse como presidente del PAN:

“A empellones, entre gritos soeces, colmado de injurias y de golpes, entre un coro diabólico de burlas y blasfemias, bajó la primera víctima (Gustavo A. Madero) al lugar de su final tormento”.

“Noventa o cien se abalanzaron sobre el indefenso prisionero; y a puntapiés, a bofetadas y a palos lo llevaron al patio, donde está la estatua de Morelos… chorreando sangre, con el rostro descompuesto por los golpes, con los cabellos en desorden y las ropas destrozadas… se aferró con ambas manos al marco de la puerta y ofreció dinero, suplicó a sus feroces victimarios que no lo mataran; recordó a su esposa y a sus hijos… a su hermano, candidato al cadalso…”

“Los ciudadelos rieron y a cada frase le llamaban cobarde. Uno dio el ejemplo, un desertor del batallón 29 de apellido Melgarejo, con su bayoneta le saco el único ojo que tenía. Ciego don Gustavo, lanzó un doloroso grito de terror y desesperación. Se encogió, con violencia de resorte, y luego, quedó mudo”.

Más de 100 años después, Gustavo Madero Muñoz, el descendiente, se aferra en servir a una corriente ideológica, la derecha, que acabó con un proyecto histórico que nació en 1910 y que cerró el capítulo con los asesinatos de Francisco I. Madero y José María Pino Suárez.

El sufragio efectivo y la no reelección, son pendientes que han dejado los gobiernos priistas y panistas con la sociedad mexicana. 

Por lo que respecta a la dupla Cordero-Oliva, alguien sabe qué ofrecerán y qué garantizarían al frente de Acción Nacional, cuando todo México sabe que son movidos desde Harvard por el titiritero Calderón.

Seguramente Cordero-Oliva eludirán el tema de la corrupción (remember “Oceanografía” y la famosa “Estela del Bicentenario”, por citar dos ejemplos).

De Gustavo Madero, simplemente hay que reiterar que busca la reelección en Acción Nacional para que continúe siendo un partido a disposición, no de oposición. 

Una de Juan Manuel Oliva

Cómo estarán las cosas en el Partido Acción Nacional.

Va la breve historia:

Hace más de 30 años Juan Manuel Oliva, aspirante a secretario general del PAN, era un reportero gris, tirándole a oscuro. 

Sus severas limitaciones para el oficio hicieron que probara suerte en más de un diario de circulación nacional. Fue un fracaso.

Después, decidió radicar en la ciudad de León, Guanajuato, donde “deslumbró” al dueño del periódico AM, quien lo hizo director general. 

Por cierto, sus ingresos eran mínimos. De pronto nos enteramos que empezó una aventura en la vida política de esa entidad y, por su manera de pensar, se integró a las filas neopanistas (yunque), hasta llegar a ser gobernador.

Hoy, Juan Manuel Oliva, después de tantos tumbos laborales y económicos, no tiene problemas de ninguna índole.

¿Se sacaría el Melate o los Pronósticos Deportivos?

Y hasta se ha convertido en guía moral del panismo.

Ni duda, es explicable la caída del PAN en asuntos de autoridad y calidad moral.

Javier Lozano y Molinar Horcasitas

Cuando detonó la bomba de las tropelías que realizó Gastón Azcárraga, con el juguete (Mexicana de Aviación) que le regaló Fox, dos excolaboradores del expresidente Calderón, pusieron sus barbas a remojar.

Uno de ellos fue Javier Lozano Alarcón, quien como secretario del Trabajo, fue clave en lo que hoy padecen miles de trabajadores de lo que fue esa empresa aeronáutica.

El otro es el entonces secretario de Comunicaciones y Transportes, SCT, Juan Francisco Molinar Horcasitas, quien integró el grupo de especialistas que le armaron un reloj en lo oscuro a los empleados de Mexicana de Aviación.

Pese a todo, no pasa nada.

Tanto Lozano como Molinar Horcasitas duermen tranquilos y comen muy bien tres veces al día.

Una reacción inmediata de Felipe Calderón

A pocas horas de que Gustavo Garibay, alcalde de Tanhuato, Michoacán, fuera muerto en un atentado, Felipe Calderón, vía Twitter, envío las condolencias respectivas… Bien por “El Señor de las Guerras”.

Sin embargo, después de varios días, los mexicanos siguen esperando de Calderón, una explicación del caso “Oceanografía”… Aunque sea vía Twitter. 

¿Verdad que no es lo mismo que lo mesmo?

Síguenos en Google News para estar al día
Salir de la versión móvil