Llega maltrecho Madero y otra más de Decanini
Un alicaído y desesperado Gustavo Madero, dirigente nacional del PAN, tendrá hoy en Monterrey una encerrona con panistas de Nuevo León que son consejeros nacionales del partido.
Madero amanece en la sede estatal del albiazul que encabeza Sandra Pámanes, buscando el respaldo de los panistas para la reunión del Consejo Nacional del próximo 11 de agosto.
La cabeza de Madero pende de un hilo, tras los desastrosos resultados que obtuvo su partido político en las elecciones del 1 de julio, pero el senador de Chihuahua se niega a renunciar a su cargo de manera voluntaria.
Redes MonterreyUn alicaído y desesperado Gustavo Madero, dirigente nacional del PAN, tendrá hoy en Monterrey una encerrona con panistas de Nuevo León que son consejeros nacionales del partido.
Madero amanece en la sede estatal del albiazul que encabeza Sandra Pámanes, buscando el respaldo de los panistas para la reunión del Consejo Nacional del próximo 11 de agosto.
La cabeza de Madero pende de un hilo, tras los desastrosos resultados que obtuvo su partido político en las elecciones del 1 de julio, pero el senador de Chihuahua se niega a renunciar a su cargo de manera voluntaria.
El dirigente nacional busca en Nuevo León, uno de los pocos estados donde el PAN logró un triunfo electoral, conseguir una bocanada de oxígeno que le ayude a su agónica caída.
Entre los panistas de Nuevo León que están citados para hoy en la sede del partido son el ex alcalde Fernando Larrazabal, Raúl Gracia, Mauro Guerra, Juan Carlos Ruiz, Obed Meza, Orlando Pérez, Alfredo Rodríguez y Baltazar Martínez.
También Fanny Arellanes, Gregorio Hurtado, Felipe Cantú, Víctor Fuentes, Julián Hernández, Alfonso Robledo, Hiram de León y Marcos Mendoza.
El problema que se le presenta a Madero es de aritmética simple: los consejeros de Nuevo León no son más de 20 y en el resto del país hay más de 300 panistas enojados por la debacle que sufrió Acción Nacional.
Otra de Aldo Decanini
No hay área de la administración del alcalde Mauricio Fernández más cuestionada que la de desarrollo urbano, y no hay un funcionario municipal más señalado que Aldo Decanini.
Sin embargo, por una razón desconocida Decanini sigue desempeñándose como titular de la Secretaría de Control Urbano de San Pedro.
Hoy, otra vez Decanini está en el ojo del huracán por hacerse de la vista gorda en los trabajos de ampliación que realiza un particular en la Plaza San Pedro, que la semana pasada ocasionó un derrumbe en el estacionamiento subterráneo.
Hace dos meses Decanini tuvo que enfrentar por sospecha de corrupción la salida de su socio Joaquín Margáin, sobrino del ex alcalde Fernando Margáin, encargado del Jurídico.
No hubo día en la campaña electoral que a Ugo Ruiz, alcalde electo de San Pedro, sus rivales le recordaran la corrupción que se ventila en el área de permisos de construcción y de uso de suelo.
¿Qué fuerza oculta mantiene a Decanini al frente de la Secretaría de Control Urbano?
Agandalle de Almaguer
Parece que el priista Alberto Almaguer, el eterno aspirante a la Alcaldía de Guadalupe, no aprende que en la política muchas veces no funciona eso de que a quien madruga, Dios le ayuda.
Apenas terminó la veda electoral, el subsecretario de Vinculación y Atención a Grupos Vulnerables del Estado hizouna brigada social en Guadalupe con priistas de la CNOP.
La intención de Almaguer era agradecer a los priistas el trabajo en la pasada elección y ponerse a sus órdenes.
Pero los cenopistas convocados siguen sin entender por qué estaba tan agradecido Almaguer si él no fue candidato.
Hay que recordar cómo Almaguer fue tumbado de última hora de la candidatura del PRI a una diputación federal, supuestamente para cumplir con la cuota de género.