Ocurrió de nuevo. Un seguidor del Querétaro fue agredido por un grupo de vándalos enfundados con camisetas del Atlas. La víctima, golpeada en un autobús de transporte público en Guadalajara, fue hospitalizada. ¿Hasta dónde tiene responsabilidad la Liga BBVA MX?
Esta columna 163 de Fan PRO se entrega el miércoles 3 de abril de 2024, tres días después de la realización del partido del Atlas ante el Querétaro, que ganó este último por 2-3, correspondiente a la Jornada 13 del torneo Clausura 2024.
Luego del encuentro que representó una nueva edición de rivalidad deportiva extendida fuera de la cancha, Gerardo Primero abordó un colectivo para disponerse a regresar a su lugar de origen cuando fue increpado.
Un grupo de jóvenes presuntamente barristas del equipo local que manifestaban a todo pulmón su molestia por la derrota se percató que el aficionado huésped llevaba debajo de la ropa una camiseta de Gallos Blancos, lo cual desencadenó la furia de los rijosos que se abalanzaron sobre él para golpearlo, según relata la periodista Alejandra Benítez en su nota para Grupo Reforma. Hay un video difundido en X, antes Twitter, como testimonio de lo ocurrido.
Los agresores no pararon hasta ver a Gerardo inerte desmayado por la paliza que recibió y una persona que dijo ser su amiga reportó su desaparición en redes sociales, hasta que recibió el reporte de que se encontraba internado en un hospital.
En dicho video que se hizo viral, primero aparece en las imágenes con la camiseta del River Plate, pero debajo llevaba la del Querétaro, lo que le valió para ser vapuleado por los apoyadores del bando contrario.
La ‘libra’
La usuaria de Facebook con el nickname de Jazz Ibarra notificó a su comunidad el lunes que su amigo Gerardo Primero fue localizado y fuera de peligro tras ser atendido por personal médico. Ella misma dio a conocer que el afectado era oriundo de San Juan del Río, quien no se había pronunciado aún públicamente por lo que le pasó hasta el cierre de esta columna.
Ibarra había difundido desde su cuenta personal una foto de Gerardo posando desde la tribuna del Estadio Jalisco con la cancha del mismo como fondo. Luego de tener la información de que se encontraba recuperándose utilizó la misma gráfica con la leyenda de “¡Localizado!”.
“Ya apareció Gera, banda! Gracias a todos por compartir”, expuso Jazz en un post.
El Club Atlas no se pronunció al respecto. Por lo general, las entidades pertenecientes a la Liga MX realizan un posicionamiento ante hechos violentos únicamente si ocurren en sus estadios o inmediaciones de los mismos.
Heridas que vuelven a sangrar
Sucedió hace casi exactamente dos años. En marzo de 2022, durante el partido de la Jornada 9 de temporada regular, en el Clausura del mismo año en el Estadio Corregidora, los mismos equipos se vieron las caras y lo sucedido en el graderío pasó de inmediato a la lista de hechos reprobables derivados del fanatismo.
La batalla campal inició en la grada y se trasladó a la cancha y, en apariencia, en otras inmediaciones del Corregidora. La señal de televisión en vivo captó diferentes aspectos de la trifulca que estalló en pleno juego, al minuto 52.
Lo peor apareció, sin embargo, en videos cortos difundidos por diferentes redes sociales, en especial por la más dura, como es considerada por muchos, como Twitter. Cuerpos semidesnudos o completamente sin ropa, ensangrentados e inmóviles, en posiciones torcidas o encogidas dan aspectos de espanto. Los pasillos entre el graderío retratan uno de los vericuetos del tipo imaginado por Dante Alighieri.
De forma simultánea, hubo quien le echó más leña a la fogata para extender las llamaradas. Informadores de gran reputación reporteril se animaron a dar cifras de muertos: “Al menos 17”, tuiteó el reportero de TV Azteca David Medrano y su versión fue tendencia número 1 en la red del microblogging para ser reproducida por medios internacionales.
Pocos podrían dudar de su afirmación después de ver imágenes diversas de hombres masacrados y humillados al estilo narco, al despojarlos de su ropa.
Al final, Protección Civil de la capital queretana informó sobre 22 heridos, tres de gravedad, que fueron atendidos en diferentes hospitales, lo que también fue recalcado por Mauricio Kuri, gobernador de Querétaro: “no hay fallecidos, si no, lo diríamos”, reiteró a pregunta expresa en conferencia de prensa. La cifra de afectados al cierre de esta columna ascendió a 26 lastimados, y uno de gravedad. Una de estas personas perdió un ojo, según el mandatario estatal.
Medrano expuso una disculpa honesta por informar de manera errónea en su cuenta de Twitter.
No, un fanático nunca es un fan
Casi a la mitad de la tercera década del Siglo XXI sorprende que informadores profesionales continúen confundiendo los términos. Como si fueran sinónimos, hay quienes ocupan las palabras fan, fanático, seguidor y aficionado.
En una ponencia impartida en 2018 en un congreso organizado por la Universidad del Futbol y Ciencias Aplicadas del Deporte, este servidor expuso la diferencia que se antoja como aclaración necesaria en los diversos medios informativos, en el que se trató lo siguiente.
Lo más común es el uso indiscriminado de fan y fanático como si fueran lo mismo, quizá por su parecido fónico. Nada más equivocado.
En la cadena de percepción de los consumidores de deporte, la parte más ligera es la de ser aficionado. Del gusto, viene el amor, pero éste debe ser cultivado, al igual que sucede con las relaciones interpersonales.
El aficionado es un consumidor que por sus gustos particulares se aficiona a determinados deportes o deportistas y busca enterarse.
El seguidor es el que se vuelve un consumidor asiduo a eso o aquello que le gusta y procura enterarse.
El fan es un seguidor más dedicado. No solo busca consumir lo que le gusta, sino que trata de informarse de todo lo relacionado.
Desde el lado de las marcas, una lovemark procura tener fans, porque es el mercado más leal, no solamente está cautivo sino enamorado de lo que consume. Más que un cliente es un verdadero profesante de la fidelización, es decir, la empatía gestionada por la marca que genera su objeto de conquista.
Hay espectadores que nunca llegan a aficionarse a algo o alguien. En cuanto a conceptos, el marketing se refiere al consumidor por inercia el que de manera ocasional o consecuencial consume ciertos productos o servicios. Le llegaron sin que los buscara y los probó sin comprarlos.
Un fanático no es ninguno de los anteriores. Se trata de un personaje que quizá pueda ser seguidor del ámbito en el que desea manifestarse, pero bajo otras pautas, regularmente negativas.
Un fanático es un ejecutante del fanatismo que, en muchos casos, requiere una valoración siquiátrica.
El sitio web de información médica salud-psicologica.mx define el fanatismo como un padecimiento: “El fanatismo es un estado mental caracterizado por la adhesión tenaz y prolongada a ciertas creencias”.
El portal especializado psiquiatría.com define al fanático como una persona intolerante, con ideas religiosas o políticas sobrevaloradas. “Las personalidades paranoides con frecuencia son fanáticas”, amplía.
Se trata de un tema que genera estudios de carácter internacional. En los cuadernos forenses del Instituto de Medicina de Cádiz, se profundiza en el fanatismo como un desorden desde una doble dimensión, la cognitiva y la personológica.
“Las personas fanáticas son normalmente irascibles, fácilmente irritables al ser contrariados sus postulados, no siendo infrecuente la hostilidad hacia los que no piensan como ellas. No comparten verdaderos sentimientos con los demás”, menciona el documento.
¿Qué debe hacer la Liga BBVA MX y sus agremiados? Proteger a sus fans. No se requiere que ocurra un incidente en sus terrenos para no actuar. Debe acudir a investigaciones policiales para expulsar a los fanáticos. #CallToAction
