La bancada de Acción Nacional trae un desorden gigante y nomás no se puede poner de acuerdo con la integración de las comisiones en la Cámara de Diputados. Y es que los albiazules se quejan de que su coordinador Juan Carlos Romero Hicks sólo quiere beneficiar a sus allegados. Y pues eso encendió los ánimos de los que no son de su querencia; aseguran que sólo se quiere dar juego a Marcela Torres, Maura Rojas y Ernesto Ruffo. Todos contrarios a Marko Cortés. Agárrense porque se va a poner bueno.
Nunca más en la UNAM
La verdad es que hay que reconocer que es bueno que la Rectoría de la UNAM —encabezada por Enrique Graue— se sume a mensajes como el de Nunca Más, por el 50 aniversario de los acontecimientos en la Plaza de las Tres Culturas en Tlatelolco. Lástima que esta manifestación se dé en un contexto en el que poco han logrado Graue y compañía en materia de violencia, narcomenudeo, actividades porriles y violaciones e hostigamiento a mujeres, por sólo mencionar algunos temas en los campus universitarios.
Crónicas de la austeridad
En el recién instalado Congreso de la Ciudad de México —de mayoría morenista— parece que aún no permea la política de austeridad propuesta por el presidente electo Andrés Manuel López Obrador. Apenas ayer, después de la sesión solemne por la conmemoración de la masacre del 2 de octubre de 1968, fueron instaladas en cada una de las 66 curules de los congresistas capitalinos tabletas de la marca Apple, las cuáles no destacan precisamente por su bajo precio.
En teoría este gadget servirá para registrar la votación y servirá como apoyo para el trabajo legislativo. Habrá quien diga que los cientos de miles de pesos que se gastaron en las tabletas no representa un gasto excesivo, pero si se va sumando de poco cada uno de estos gastos, al final la cifra puede ser considerable, lo que termina contradiciendo la dichosa austeridad.
