El delantero nacido en Colombia llegó a los 15 años a México con el fin de formarse. Ahora es el hombre del momento capaz de movilizar una despedida-homenaje estilo Real Madrid aunque se marcha a otro equipo y su nombre suena como el posible salvador de la crisis de una Selección Mexicana incolora, inodora e insípida. Habrá que ver si Julián Quiñones logra aquilatar y capitalizar el hito.
Esta columna se cierra el miércoles 5 de julio de 2023, en la víspera de la Jornada 2 del Apertura, mientras la expectativa por ver en acción por primera vez al nuevo americanista en la visita al Querétaro es creciente.
Apenas el fin de semana pasado fue sujeto de fiesta en el Estadio Jalisco, ahí donde pudo lograr lo que hace unos cuantos años nadie imaginaba posible, que el Atlas fuera Bicampeón de los torneos cortos, luego de 60 años de ayuno de gloria.
El atacante arriba a un club sediento de triunfo tras el fracaso del Clausura anterior, en el cual recibió el dolor de ser victimado por el archirrival Chivas en Semifinales, lo que ocasionó un sismo en las entrañas de Coapa con la salida del estratega Fernando Ortiz y el arribo del brasileño André Jardine. Lo malo para los azulcremas fue caer en su estreno de la Jornada 1 en el Estadio Azteca 1-2 ante Juárez.
Luego de la apoteósica salida de Julián de los rojinegros atlistas, lo único que le queda a este jugador de apenas 26 años de edad es triunfar como americanista, porque además tendrá el mejor escaparate posible con la mira en un posible desarrollo en el continente europeo.
El nacido en Magüí Payán, Nariño, Colombia, el mexicano por naturalización hará mancuerna con el reciente campeón de goleo de la Liga BBVA MX, Henry Martín, lo que en el papel luce como una dupla que generará miedo.
Quiñones reveló que desea estar en el Tri y por eso realizó sus trámites completos para obtener la nacionalidad mexicana porque el propio ex director técnico Diego Cocca le llamó para ofrecerle la oportunidad. Es un hecho de que Julián es ya un elemento nacional con los mismos derechos y obligaciones.
TORRE DE BABEL QUE ESPANTA
Desde que en 1959 el empresario dueño de Telesistema Mexicano, hoy Televisa, Emilio Azcárraga Milmo con su mentalidad visionaria y creativa decidió comprar al América, comenzó la configuración moderna de este club.
En este espacio te enteraste cómo ‘El Tigre’ introdujo el malo de una película en la que ya existía el bueno, Chivas, para conformar así el primer gran acto mercadológico exitoso en el deporte mexicano.
Mientras el Rebaño Sagrado, en esos momentos el Campeonísimo que coleccionó títulos entre 1956-57 y 1964-65 –15 en total por sus siete Ligas, seis Campeón de Campeones, una Copa México, y una Copa de Concacaf, todo en solo nueve años– tenía únicamente a jugadores mexicanos, el súper adversario del mismo debía ser el que trajera a los mejores extranjeros de alta calidad internacional.
Fue así como desde Edvaldo Izidio Neto ‘Vavá’, campeón del Mundo con Brasil en Chile 1962, hasta los chilenos Carlos Reinoso y Osvaldo Castro ‘Pata Bendita’, el también amazónico Dirceu Guimaraes, el argentino Daniel Alberto Brailovsky, los africanos François Omam Biyik, camerunés, y Kalusha Bwalya, zambiano, más el peruano Julio César Uribe hasta el también araucano Iván Zamorano, el sello de las Águilas era traer a los foráneos con estela mundial más rentables.
Para el Apertura 2023 esta característica se reeditará con mucha potencia con sus forasteros con calidad de selección. Además de los mexicanos, el lateral derecho pistón Kevin Álvarez y el ariete Henry Martín, tendrá al medio escudo español Álvaro Fidalgo, al volante paraguayo Richard Sánchez, al creativo chileno Diego Valdés, al ahora ofensor estadounidense Alejandro Zendejas, al media punta argentino Leo Suárez, y a los delanteros uruguayos Brian Rodríguez y Jonathan ‘Cabecita’ Rodríguez, además del mencionado colombiano-mexicano Julián Quiñones.
LA CRUZADA PARA MEJORAR LA ESPECIE
El 4 de julio inició la quinta edición del Diplomado de Periodismo Deportivo Digital en La Septién. El esfuerzo ha valido la pena si la atención se va a los números en las cuatro generaciones anteriores: 61 egresados y hasta el momento más del 50 por ciento de alumnos instalados en proyectos del ámbito.
La Escuela de Periodismo Carlos Septién García actúa desde su trinchera y cumple nobles objetivos: dotar a los medios de profesionales capaces, actualizados y vigentes, así como ayuda a mejorar la especie de informadores con un barniz académico, necesario cuando se trata de acreditar con el ejercicio periodístico de una labor de calidad.
La crisis de credibilidad en espacios informativos es evidente. Contrario a lo sucedido con el COVID-19, hay una pandemia que cada día se ve más fuera de control, la propagación de contenidos virulentos que enferman el ambiente. Paquetes etiquetados como noticias resultan un fiasco, un cúmulo malintencionado de fake news.
La infodemia o viralización de las notas falsas saturan los escenarios digitales, la mayoría de las veces de una forma manipuladora. La ‘era de la sobreinformación’ exige mejores traductores. Los consumidores están hartos de no saber para dónde mirar si su objetivos es nutrirse correctamente.
La única forma sana de contrarrestar estos problemas es concientizar a las audiencias a que distingan lo que consumen y que los informadores realmente se profesionalicen. Este diplomado impartido por cracks profesionales del periodismo y el marketing deportivo y del cual este servidor es el coordinador, pretende ser una opción seria como real para cumplir lo que tantas veces se cuestiona, si el papel del periodista es apenas informar o también educar.
Ante tanta urgencia por saber a quién creerle, resulta también obligado preparar a un mercado de profesionales con toda la barba, que posean las técnicas y el método de investigación para el mejor quehacer periodístico, pero que también posea la ética para encaminar el esfuerzo requerido. Si esto puede alcanzar para algo más que enterar a la gente de lo que le sucede y la forma con algo de educación… ¡Qué mejor!
Es de pena ajena que informadores caigan a diestra y siniestra en el error de difundir fake news por el simple hecho de que es más fácil generar polémicas baratas que atraigan followers e interacciones instantáneas para que luego con la mano en la cintura deban reconocer ante su público leal que se equivocaron. ¿Y el daño viral qué?
El batallón de maestros que acompañan a quien esto escribe en esta hermosa misión son Arturo Vega (Creador Multimedia en El Heraldo de México), Diego Piña (director de marketing en Futvox), Luis García Villalobos (director social media en TUDN México y TUDN USA), Javier Balseca (brand manager en México de Las Vegas Raiders de la NFL) y Eric Fong (director de Futbol Sites México).
Va un agradecimiento especial al master Enrique Garay por aceptar ser el padrino de la actual generación de periodistas que desean marcar la diferencia de manera positiva con un periodismo de calidad.
Siempre se está a tiempo de enderezar el mundo si se tiene el poder de decisión y el conocimiento. Aún te puedes inscribir (WhatsApp: 5527284597). #TeApunto
Fuentes externas: Notas del autor en ESPN y sus columnas en Forbes.com.mx, el Heraldo de México y Fan Datos de CID Consultoría
¿Quién es Héctor Quispe?
Periodista y mercadólogo. Dirige CID Consultoría, casa de soluciones en cifras y contenidos enfocados en el fan y su identidad; es MBA en Dirección y Gestión de Entidades Deportivas, por la Universidad Europea de Madrid; tiene la especialidad de Periodismo Deportivo por el Programa Prensa y Democracia de la Universidad Iberoamericana. Coordina el Diplomado de Periodismo Deportivo Digital en la Escuela Carlos Septién García desde 2019, y da clases en el de Marketing and Communication for Sports Brands, en la Universidad Anáhuac. Su análisis es consultado por diferentes medios en torno a negocios y deporte: MKT & Business, Playboy MX & LatAm, Red Forbes, MedioTiempo, Expansión, El País, Fox News, Telemundo, Televisa: Noticieros, Foro TV, TUDN e Infobae, El Economista, El Universal, Excélsior, HUB Digital y La Verdad Noticias, entre otros. Es coautor del libro “Cómo hacer Periodismo Deportivo. Una visión Iberoamericana” (Universidad de Sevilla, 2021), y desde 2020 publica esta columna cada jueves en la multiplataforma de Reporte Índigo.