La frivolidad política es el sello del gobierno de Jaime Rodríguez y del Congreso de Nuevo León.
El mandatario y los diputados llevan el cortoplacismo y la ligereza en su ADN hasta en temas importantes como el de la seguridad de los nuevoleoneses.
No hay duda de eso. Y ayer quedó demostrado una vez más cuando el mandatario estatal permitió que su secretario de Seguridad, Bernardo González, renunciara a su cargo para ser nombrado presidente concejal de Monterrey, designación que fue aprobada por mayoría por los legisladores locales.
En tres años Jaime lleva tres secretarios de Seguridad: Cuauhtémoc Antúnez, Arturo González y Bernardo González.
Apenas ayer por la mañana, durante la Glosa del tercer informe de Gobierno, González compareció en el Congreso contestando preguntas de los diputados sobre la inseguridad, la violencia en Nuevo León y haciendo compromisos.
Horas después, por la noche, González olvidó todo lo que dijo en su comparecencia (y también los diputados lo hicieron) y tomó protesta como presidente concejal municipal de Monterrey.
No se entiende la designación de Bernardo González como presidente concejal municipal de Monterrey tomando en cuenta la responsabilidad que tenía como secretario de Seguridad del Estado en un momento donde se libra una disputa por la plaza de la ciudad entre cárteles de la droga.
Tampoco se explica por qué los diputados del PAN vetaron un perfil como el de Alberto Palomino, directivo de Cemex, y apoyaron uno político como el de González.
¿Será que Jaime Rodríguez le cobró algún favor pendiente del 2015 a Felipe Cantú y este no le pudo decir que no?
Los votos del PRI a favor de Bernardo son más entendibles por el pasado priista que tiene el ahora Concejal presidente. No seamos ingenuos: el PRI no hubiera apoyado a Bernardo si este hubiera sido propuesto por Jaime o Manuel González, sus actuales protectores.
El apadrinamiento que tuvo González desde la Ciudad de México fue clave para conseguir los votos de la bancada del PRI.
Reaparece exoperador de Yeidckol
El exoperador de Yeidckol Polevnsky en Nuevo León, Alfredo Treviño, reapareció ayer públicamente con la presentación de una nueva tribu dentro de Morena.
Conformado principalmente por candidatos perdedores de Morena, el Bloque Nuevo León se presenta como el principal grupo disidente dentro del partido de Andrés Manuel López Obrador.
Será encabezado por Alfredo Treviño, quien formó parte de la cúpula de Morena en Nuevo León antes de la elección pero luego se distanció de Polevnsky.
Los integrantes del Bloque Nuevo León señalaron que defenderán en el estado la agenda progresista del presidente electo López Obrador. Su primer comité estará en el municipio de Santiago, Nuevo León.