Como hace dos semanas con el caso del niño plagiado y asesinado por sus secuestradores, otra vez está bajo cuestionamientos el trabajo del Grupo Especial Antisecuestros de la Procuraduría General de Justicia.
Esta vez es por la intervención en el secuestro del hijo de un comerciante que el domingo fue encontrado muerto en El Faisán, en el municipio de Santiago.
Hay versiones que señalan que el hombre plagiado fue asesinado por sus secuestradores cuando se enteraron de la intervención de la Unidad Especializada Antisecuestros.
En la investigación del secuestro los agentes de la UEAS habrían cometido la torpeza de arribar a una casa de seguridad en vehículo oficial y no en los autos sin identificación.
¿Seguirá defendiendo el procurador Bernardo González a Héctor Chapa, coordinador de la Unidad Especial Antisecuestros?
La mala suerte de Yarrington
Para mala fortuna del exgobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington, fue detenido el domingo por la Policía italiana y no en Nuevo León por la Procuraduría estatal.
No hay que olvidar que hace dos meses la Procuraduría estatal detuvo al empresario Fernando Alejandro Cano Martínez, quien está acusado en Estados Unidos de ser cómplice de Yarrington en los delitos de lavado, delincuencia organizada y tráfico de drogas.
Pese a que existía la ficha roja de la Interpol, donde se buscaba a Cano Martínez junto con Yarrington a nivel internacional, el empresario tamaulipeco fue liberado horas después de ser aprehendido en un hotel sampetrino por las autoridades estatales.
¿Por qué?
Según Aldo Fasci, vocero de seguridad del Gobierno de Nuevo León, fue liberado por contar con un amparo contra cualquier detención.
El Subsecretario VIP
Poco a poco el subsecretario de Administración del Estado, Jesús Hernández, comienza a disfrutar los privilegios de un cargo como el que ocupa en el gobierno de su amigo Jaime Rodríguez.
De ser alcalde de un municipio modesto como el de García, no es raro que a Hernández se le vea hoy en eventos VIP codeándose con la socialité regiomontana.
El domingo pasado el funcionario estatal asistió a la final del Abierto Monterrey.
La verdad desconocíamos la afición de Hernández al tenis, pero lo que llamó la atención fue la zona VIP que ocupó el funcionario estatal en el Club Sonoma para ver el partido entre la alemana Angelique Kerber y la rusa Anastasia Pavlyuchenkova.
Nos aseguran que el precio del palco donde Hernández se ubicó tenía un costo de 112 mil pesos.
Igual alguien le regaló las entradas, algún amigo proveedor, pero todos sabemos que en la política no hay lonche gratis.
