El frente amplio por México que el pasado lunes 26 de junio se constituyó en la capital de la república entre partidos políticos, organizaciones ciudadanas y empresariales, es resultado de un intenso y largo trabajo de dialogo y negociación entre las partes involucradas para coincidir plenamente en un objetivo común; conquistar democráticamente la presidencia de la república, así como la mayoría de Diputados y Senadores en el Congreso de la Unión.
La decisión de compartir anhelos de bienestar integral para México en un país con alta polarización social y política, con un régimen autoritario, un estado de derecho debilitado, y una población dividida cuando menos en tres porciones radicalmente identificadas; «seguidores del régimen, opositores e indiferentes», hacen que la tarea de convenir acuerdos nacionales, especialmente entre opositores al régimen, sea una tarea por demás desafiante y peligrosa, como también urgente e imprescindible.
El camino por transitar no es sencillo, sin embargo, la oposición ya dio el primer paso. Concretar el Frente, definir la ruta a seguir, establecer las reglas del juego que les permitirá conseguir mediante diálogo, tolerancia, responsabilidad social, propuestas, entendimiento y acuerdos, quién será el líder del proyecto del Frente. La bienvenida del presidente a este Frente por México, no se hizo esperar, «denostación» es el verbo que resume el contenido de sus palabras.
No serán pocos los inesperados acontecimientos que se presentarán durante el desarrollo del proceso interno «convenientes y no» del Frente por México. El primero fue el anuncio de Alito Moreno presidente del PRI, de no buscar encabezar el proyecto. Bien por su decisión para ocuparse de tiempo completo en dirigir al partido y fortalecer el Frente. Eso es sin lugar a dudas, su responsabilidad fundamental. Por su parte, el gobernador de Yucatán Mauricio Vilas Dosal, declinó en su aspiración presidencial, para ocuparse de tiempo completo en servir a su estado natal, que por cierto, lo está haciendo muy bien, es el mejor calificado.
Entre las mujeres destaca la senadora Xóchilt Gálvez y por el lado de los hombres Enrique de la Madrid entre otros más que participarán en el proceso anunciado.
El trayecto estará marcado por una andanada de ataques lanzados desde el palacio nacional, que harán cimbrar a los más intrépidos y decididos. Sin embargo, este proyecto, abiertamente cuenta con el apoyo de amplios sectores de la sociedad civil «esto es la gran diferencia» quienes anteriormente, han mostrado determinación y arrojo para defender a las instituciones nacionales que están siendo embestidas por el poder gubernamental.
En esta ocasión, los ciudadanos de conciencia activa, más allá de la representación de los partidos políticos involucrados, será determinante para obtener los mejores resultados en la próxima contienda electoral del año entrante.
Para el mes de septiembre, los frentistas, tendrá el líder que los representará. El siguiente paso será entonces, fortalecer día con día la unidad, escribir con el cuidado esencial necesario, la narrativa y las propuestas inteligentes que presentarán a la nación, y sobre todo, el método, la forma y las voces que utilizarán para comunicarlo en todo el territorio nacional. La competencia será real, tensa, muy difícil, sin embargo, la ciudadanía deberá decidir en primer término, si le importa ser parte de los constructores del mejor futuro para todos los mexicanos, o simplemente, «le da igual lo que pase». Ciertamente en una democracia se gana y se pierde.
La integración del Congreso de la Unión con la más alta representación ciudadana, deberá ser la prioridad. Mantener los equilibrios políticos necesarios para contener los impulsos autoritarios de cualquier gobierno, simplemente resulta indispensable.
En México, esta es la hora de los ciudadanos.
