“La humanidad se escucha y se comprende simultáneamente de un confín a otro de la tierra… Y unido permanecerá por siempre el mundo gracias a su victoria sobre el tiempo y el espacio….”
Stefan Zweig.
Por que estamos seguros que TODOS SOMOS UNO, es necesario que la sociedad lo capte y a partir de ahí actúe.
No es posible que frente a los acontecimientos negativos que vivimos día con día no digamos ¡YA BASTA!… Y hagamos algo en consecuencia.
Muchos se preguntarán por qué hasta hoy llama la atención el dolor de la muerte del joven empresario panista Hernan Beldén Elizondo, cuando a lo largo del año y de este mes han muerto muchos y de peor manera.
Yo estoy de acuerdo con ellos y les digo: “No es Hernán, somos todos”. Y así lo hemos hecho con Lucy en Morelos, con Otilio en Colegio Civil, con las madres de los desaparecidos en el Museo Metropolitano y nos seguiremos manifestando, porque estamos seguros que si se lo hacen a uno, nos lo hacen a todos.
Y es que al final del día todos estamos interconectados.
Por ello invito a que captemos que es urgente exigirle a los alcaldes entrantes los 10 puntos que firmaron en el programa “Alcalde, ¿cómo vamos?”.
También a pedirle a los diputados locales que modifiquen las leyes para que paren el caos de la deuda en el que hoy nos encontramos en el Estado.
Que les pidamos que cumplan con su deber de vigilar las responsabilidades del Ejecutivo y que si éste no ha dado el ancho lo sustituyan.
Un correo electrónico, un twitt, una llamada telefónica, una recordada en la calle de cuáles son las tareas de los servidores públicos y hacia dónde queremos ir, es una tarea que puede hacer la diferencia.
Es momento de dejar atrás el YO SOLO, NO PUEDO. Si muchos creemos que es posible lo haremos. Que las muertes de este mes de septiembre, como las anteriores, sirvan para recordar que todos somos uno y que cualquier homicidio nos afecta.
Lo que no hemos querido ver como sociedad, y parece que ya nos acomodamos, es el caso de la corrupción de personajes que esperan en la antesala de lo que será la nueva vida pública federal, tanto en el ejecutivo como en el legislativo.
Por un lado se tiene en la mesa de las negociaciones sobre el tema de la corrupción, ni más ni menos, que a Jorge Emilio González “El Niño Verde” y por otro lado a Emilio Gamboa Patrón, quien está más que ligado con Mario Marín “El Gober Precioso” y con Kamel Nacif, de forma evidente desde los videos de 2006.
Luego está el equipo de transición de Enrique Peña Nieto que tiene al frente a quien fuera responsable del caso Paultte en el Estado de México, para luego ir con el padrino del presidente electo: Arturo Montiel.
Estas son apenas algunas de las caras que están en el círculo rojo del presidente electo y luego nos sorprendemos de por qué la corrupción está como está.
No nos damos cuenta de que nosotros, con nuestras falta de acción, dejamos que ellos sigan al frente.
NO cabe duda de que la sociedad ya no puede distinguir entre lo que es, y lo que quiere ser.