Espacios libres de violencia en el deporte

En estos tiempos en que las mujeres estamos tomando impulso es indispensable que las mujeres que se dedican al deporte cuenten con espacios libres de violencia, de acoso y discriminación.

Es lamentable saber que siete de cada diez niñas en México abandonan el fútbol soccer siendo niñas por falta de espacios seguros, o porque no tienen iluminación en las canchas, o porque no tienen donde cambiarse de ropa, o porque son víctimas de agresiones o acoso de tipo sexual.

Siete talentos se pierden en el deporte femenil por violencia y discriminación en nuestro país, cuando deberían de recibir todo el apoyo, y en lugar de ello emigran a otros países, frente al acoso sexual de sus entrenadores o directivos.

Lo que acabamos de ver en España, en la final de fútbol femenil, donde gana el equipo español, y lo que trasciende es el beso que el presidente de la Federación de Fútbol, sin consentimiento de la futbolista, va y le planta en la boca, nos habla del gran reto que tenemos.

Déjenme compartirles la historia de Sarahí, una niña de 11 años que jugaba básquetbol en Cuautla, Morelos. “A mí me gustaba mucho jugar básquetbol, hasta que el entrenador se empezó a vestir donde nosotras nos cambiábamos y nos veía mientras metía su mano a sus pants, y nos amenazaba de que si decíamos algo no nos iba a meter al partido”, me contó Sarahí.

Ana es una niña de siete años, del Estado de México, que no puede jugar fútbol en su escuela porque sólo hay un equipo de hombres, y las autoridades educativas no la dejan jugar con ellos, le dicen que no puede jugar porque es niña, sin darle opción alguna.

Estos casos son apenas un botón de muestra de la realidad que están viviendo niñas y adolescentes en el mundo del deporte. No solamente sufren agresión física, sexual, verbal, sino también discriminación en materia de sueldos y de ingresos. No se le paga lo mismo a una mujer en el deporte que a un hombre, ni se le da la misma publicidad.

Por eso presenté una serie de iniciativas en el Senado, con el objeto de promover la igualdad de género, para que se de capacitación en materia de equidad de género en el deporte, y para que sea obligatorio crear espacios seguros, no solamente en el fútbol, sino también en el béisbol, basquetbol, natación, americano y en todo el deporte nacional.

Además, propuse que el Instituto Nacional de las Mujeres y la Conade, sean los responsables y tengan la obligación de organizar y desarrollar cursos de capacitación en igualdad de género en el sector deportivo de nuestro país.

Y finalmente, una reforma a la Ley General de Cultura Física y Deporte para promover la igualdad de género en el deporte mexicano.

Nunca más una niña, una adolescente debe de renunciar a su pasión, a su amor por el deporte por miedo o por falta de espacios seguros. ¡No más violencia en el deporte contra niñas adolescentes y mujeres!