El PAN se llevó las ocho columnas esta semana a nivel nacional, al sacar a la luz los malos usos del programa Campaña contra el Hambre, en Veracruz. Pero en lo local no se quedó atrás, pues la elección de sus consejeros estatales ha sido todo un gran tema.
Resulta interesante la coincidencia de las personas que protegen para que estén en puestos importantes y vinculados con el panismo del control: en Monterrey los del DIF, que reparten despensas, controlan dinero y gente a través de becas y dádivas y en San Pedro se han puesto de consejeros a la esposa del presidente del PAN Municipal, pero que además maneja un area de mucho dinero en el Municipio, que es ni más ni menos que Servicios Primarios.
También en San Pedro proponen de consejero al particular del alcalde: Es decir con quién, cómo y a qué horas se reúne el alcalde. Bien checadito que lo tienen así que hay qué premiar al particular.
No cabe duda que estas asambleas para consejeros son toda una capacitación para los panistas más jóvenes, quienes aprenden sobre el control de los votos.
Por otro lado, en San Pedro es fundamental seguir la huella al problema de los parquímetros y la recompra de los mismos por parte del Ayuntamiento.
Sigue en duda si además de corrupción, hay complicidad y pago de cuentas por saldar. Hay que ver si se pueden responder las siguientes preguntas:
1. ¿Qué estará pagando la administración de Mauricio Fernández y hoy de Ugo Ruiz al tapar el cochinero que se ve en esta asignación y que costará al Ayuntamiento 185 millones ?
2. ¿Será el contrato de los parquímetros para pagar favores electorales a través de esta APP?
3. ¿Va la administración actual a proceder contra quienes hicieron mal las cosas en la administración anterior?
4. ¿A quién, o qué intereses se están protegiendo?
5. Que otros negocios con el Municipio sampetrino tiene el amigo de Mauricio Fernández, de San Pedro Meters?
En fin, son muchas las razones para ver que al igual que se dio en el caso de Walmart, los parquímetros apestan.
Para no mirar sólo a los azules, hablaremos de lo que vivimos en la pasada visita de EPN a Nuevo León, para el Foro “México en Paz”, que se llevó a cabo en Cintermex.
Lo que se vio ya ha sido contado por muchos: excesiva o burda seguridad, retraso en la llegada de EPN.
El gran montaje, como lo dijo de alguna manera hace tiempo en su libro Jenaro Villamil.
Un escenario perfecto: reflejo del pacto en donde están presentes gobernadores de todos los colores, sabores y tendencias: Tamaulipas, Sinaloa, Baja California, Morelos, Coahuila, entre otros.
Presidentes de los organismos empresariales, dos rectores, uno de una institución pública, otro de una privada.
Mujeres del poder judicial y del legislativo, Ong’s haciendo entrega de propuestas con personajes de primera, para que la foto saliera muy bien y valga con el paso del tiempo como ha sido la de Sicilia.
Pero la foto fue lo importante, porque no hubo tiempo para escuchar a los integrantes del presidio.
“El Señor” se tuvo que retirar y los gobernadores tuvieron que hablar en lugar de quienes llevaban sus propuestas ciudadanas.
A varios de los invitados que fueron traídos desde México en avión privado, una vez aquí ya no les concedieron la palabra.
¿Cuántos de estos eventos más se llevarán a cabo?
¿Será necesario tanto movimiento de gente cuando la tecnología ya permite otro tipo de comunicación?
Es decir, se pueden recibir todas las propuestas del mundo por internet y sólo acudir a los lugares remotos donde no existe la infraestructura para ello.
Cuánto cuesta y seguirá costando todo este teatro donde la foto “vende” más que la realidad.
Yo le apuesto a que sea el trabajo real el que se conozca y no a la foto que es un montaje.
El teatro es para entretenerse, las acciones son las que cambian las cosas.