En quién confiar

Fue hace poco cuando Meade, sin éxito, lo impulsó para la cartera directiva del Fondo Monetario Internacional. La distancia entre el ganador y el segundo lugar fue tanta, que poco espacio quedó para hablar de una decorosa participación. Ahora, el canciller tiene su segundo fracasó, al tratar de impulsar a un mexicano para ocupar una silla de liderazgo en un organismo internacional. Por razones obvias, no se dio amplia publicidad al demoledor apoyo mayoritario en favor del brasileño. 

Gabriel Reyes Orona Gabriel Reyes Orona Publicado el
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Fue hace poco cuando Meade, sin éxito, lo impulsó para la cartera directiva del Fondo Monetario Internacional. La distancia entre el ganador y el segundo lugar fue tanta, que poco espacio quedó para hablar de una decorosa participación. Ahora, el canciller tiene su segundo fracasó, al tratar de impulsar a un mexicano para ocupar una silla de liderazgo en un organismo internacional. Por razones obvias, no se dio amplia publicidad al demoledor apoyo mayoritario en favor del brasileño. 

Seguro no faltarán nuevas cruzadas para tratar de anotarse un logro en el terreno de la diplomacia orgánica, pero los aspirantes tendrán que considerar decirle al titular de la SRE: “no me ayudes compadre”.

En su momento, Meade consideró el puente de plata para darle salida a Carstens, y así,  abrirse paso hacia el Instituto Central, bien para el caso de no alcanzar cartera o para colocar alguno de los suyos. La jubilación de su padre, dado los generosos reconocimientos de antigüedad, ya no será problema en poco tiempo. 

La captura e inutilización de la junta de gobierno no fue consecuencia de la estructura legal, sino, como usualmente pasa, de las nominaciones contrarias al espíritu de la ley. La consigna es clara, de los cuatro puestos, uno para Banamex, uno para Bancomer, otro para la SHCP y uno más salido de las filas internas. El pacto informal goza de cabal salud tras 20 años. 

Calderón por supuesto ya puso su carta, como en muchas otras dependencias públicas, se trata de Lorenza Martínez Trigueros. Sin embargo, dado el desenlace controversial con Guillermo Babatz, la pelea por alcanzar el “pactado” puesto en la junta de gobierno no será cosa fácil. 

Incluso para Meade pudiera resultar atractivo cambiar 3 años por 6, y seguirse acomodando al jerarca en turno. 

Por lo pronto, aquel que realizó una poco razonable inversión en oro para la reserva de activos internacionales, que sigue haciendo crecer el monto nominal de la reserva, para sustentar el crecimiento de la deuda pública, considerando como activos aportaciones a organismos internacionales y otros activos de difícil recuperación, nos dice que la inflación es pasajera.

Sí, el diagnosticador de catarritos, es un virrey con prestaciones palaciegas, pero con un equipo cada vez más alejado del perfil tradicional del banquero central, que inevitablemente quedará en medio de una batalla ocasionada por un cambio generacional de economistas.

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