Los que escucharon ayer la entrevista que Carmen Aristegui le hizo al jefe del SAT, Aristóteles Núñez, seguramente coincidirán en que tiene una gran capacidad para comunicar.
Y es que más allá de si se está de acuerdo o no con las explicaciones de Núñez, el hecho es que la elocuencia del jefe del SAT es más grande que la de muchos funcionarios, incluido el secretario de Hacienda Luis Videgaray.
Sorprende que aunque Núñez no es economista, ni abogado, ni cuenta con maestrías ni doctorados, siempre tenga una respuesta razonable a la mano, aun en cuestiones tan complicadas como las que tienen que ver con lo fiscal.
Si duda Aristóteles Núñez sería un excelente vocero del gobierno del presidente Peña Nieto.
Deshojando margaritas
Lo que pareció ser el destape oficial de Josefina Vázquez Mota como candidata a la presidencia del PAN, resultó que no lo fue tanto.
Y es que la suspirante a dirigir Acción Nacional, aunque aparentemente sigue ostentándose como una crítica de la reforma fiscal, todavía no dice si contenderá o no por la presidencia del PAN.
Más allá de la increíble explicación que la propia Josefina ha dado de que consultará con su familia la decisión de contender o no, se han filtrado al menos otras dos explicaciones:
La primera sostiene que las dudas de Josefina más bien se deben a que el presunto apoyo que dice tener de un grupo de exgobernadores y notables panistas, todavía no está suficientemente amarrado.
Y la segunda señala que Josefina seguirá deshojando margaritas hasta recibir una señal clara de que seguramente ganará.
60 millones de pobres
Durante el agarrón que se dieron ayer el panista José Isabel Trejo, y el coordinador de la bancada del Verde Arturo Escobar, el ecologista le sacó sus trapos al sol a Felipe Calderón.
Entre otras cosas Arturo Escobar señaló que una de las herencias del gobierno de Felipe Calderón fueron 60 millones de pobres, y no los 52 que dicen los panistas.
Sin duda el ecologista tiene razón si se atiende a la medición oficial de la Coneval de la pobreza por ingresos.