El selfie de Pérez Bernal y no hay jueces para reforma

En los últimos días José Alfredo Pérez Bernal se ha esforzado mucho para verse como un líder querido entre los panistas de Nuevo León.

La tarde del martes Pérez Bernal convocó a los alcaldes albiazules y diputados a una junta de trabajo, una reunión que terminó en una pachanga.

¿De verdad tiene el líder albiazul motivos para celebrar?

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En los últimos días José Alfredo Pérez Bernal se ha esforzado mucho para verse como un líder querido entre los panistas de Nuevo León.

La tarde del martes Pérez Bernal convocó a los alcaldes albiazules y diputados a una junta de trabajo, una reunión que terminó en una pachanga.

¿De verdad tiene el líder albiazul motivos para celebrar?

Hagamos un recuento: en las últimas semanas el partido de Pérez Bernal perdió la mayoría en el Congreso del Estado por las renuncias que presentaron los diputados Luis David Ortiz y Jesús Cedillo, quienes lanzaron graves acusaciones de corrupción contra el PAN.

Luego, el nombre de Pérez Bernal apareció involucrado en el escándalo de la concesión a la empresa Taxis Excelencia, de la Ciudad de México.

Y por si fuera poco, en San Pedro el alcalde Ugo Ruiz y el senador Raúl Gracia se han declarado la guerra y en Monterrey la alcaldesa Margarita Arellanes ha iniciado esta semana un recorte de personal que afectará a decenas de panistas.

¿Realmente el dirigente del partido albiazul tiene motivos para celebrar?…

Al menos Pérez Bernal sí tiene uno y es principalmente festejar que la crisis que libra el PAN de Nuevo León haya coincidido con la elección del presidente nacional.

Lo menos que los líderes del PAN de Nuevo León quieren, en este momento, es enturbiar la reelección de Gustavo Madero con la remoción de Pérez Bernal.

Jueces de prehistoria

Tremendo lío en el avance de la Reforma del Sistema Penal Acusatorio le está llegando a los aparejos al Poder Judicial en el Estado y a la Procuraduría.

Todo esto, en medio de una nube de humo que han tendido ambas instancias, que constantemente dicen que van bien en su marcha para reformar el sistema.

La verdad es que hay tremendos rezagos, entre los que está uno muy evidente en el Poder Judicial.

Se trata de que hay actualmente 43 juzgados penales del sistema tradicional, juzgados con sus secretarios, secretarios del secretario y una bola de achichicles por todos lados.

Mientras que para la reforma penal, que ve los delitos que ya entraron a juzgarse con las nuevas reglas, solamente hay ocho jueces de control, tres de juicios orales y tres de ejecución.

La enorme desventaja habla por sí sola con estos números. Son 43 del viejo sistema, contra 14 para el nuevo.

Y además la gran pregunta: ¿Dónde van a meter a los secretarios y secretarios de los secretarios, cuando el nuevo sistema no lo permite? ¿A dónde va a ir a dar toda esa gente?

Pero lo peor, no se ve por dónde salgan recursos para mover todo este viejo andamiaje.

Preguntas para el Procu

¿Qué quiere realmente el procurador Adrián de la Garza? ¿De verdad le interesa una candidatura del PRI para el 2015, o sólo quiere conseguir fuero por los próximos tres años?

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