El peligro para México
Ciudadanos amarrados y acostumbrados a gozar de una pseudolibertad que nos han vendido aquellos que han sabido construir la dictadura perfecta.
Has ido a votar, pero, ¿ha válido tu voto? Hoy sabemos que como Carlos Salinas, otros presidentes se han sentado en la silla sin haber ganado. Sin embargo, dices vivir en una democracia, que te asusta la posibilidad de una dictadura. Abre los ojos, la dictadura existe desde hace muchos años.
Marcela Garza AguirreCiudadanos amarrados y acostumbrados a gozar de una pseudolibertad que nos han vendido aquellos que han sabido construir la dictadura perfecta.
Has ido a votar, pero, ¿ha válido tu voto? Hoy sabemos que como Carlos Salinas, otros presidentes se han sentado en la silla sin haber ganado. Sin embargo, dices vivir en una democracia, que te asusta la posibilidad de una dictadura. Abre los ojos, la dictadura existe desde hace muchos años.
Escuchamos voces temblorosas decir que con esta posibilidad de cambio que ofrece la Izquierda mexicana viene un Hugo Chávez. Me imagino, después de estos comentarios, un “buuuu” , como el que anuncia que ahí viene El Coco. Cuando la verdad es que hemos vivido en una dictadura peor que la de Chávez. Porque nos creemos libres, pero vivimos dentro de un mundo falso como el de Matrix.
Se vuelve a sentir el miedo y eso se entiende. El miedo es parte de la edad. Los adultos y los viejos cada día vivimos y sentimos más miedo. Dejamos de hacer las cosas intrépidas que marcaron nuestras vidas en una juventud visionaria y valiente.
En esa juventud donde emprendimos trabajos insólitos, negocios novedosos. La juventud donde el hombre está dispuesto a cambios.
Algunos dirán que hicieron cosas tontas, sin pensar, como casarse. Seguramente la mayoría tendrá que aceptar que si en la juventud no hubiera dado el paso ciego al matrimonio, ya no lo hubiera hecho después.
Y los hijos, ese regalo tan preciado de la vida, no estarían aquí rodeándote, quizás llenándote de nietos en estos momentos.
Lógico es pensar que por eso, los jóvenes buscan un cambio. No por que sean de la Izquierda y punto, sino porque la Izquierda significa hoy el cambio de un sistema viejo, apolillado y que huele mal.
A lo que realmente le tenemos miedo es a ese cambio. Y está bien, se vale, es parte de la vida y es parte del hombre. Vivir con miedos y pocas, muy pocas veces, tener que ser valiente.
Me pregunto si mi país requiere que hoy yo sea valiente. Buscar ese cambio, en serio, a pesar de mí, a pesar de mis miedos.
Hace dos años hubo una estampida de familias mexicanas que se fueron a vivir a Estados Unidos a causa del incremento de la violencia.
A esta lista se siguen sumando otros. El recién liberado de un secuestro, el amenazado en su negocio, al que le están cobrando piso. No ha tenido que venir a instaurarse ningún Chávez para que muchos mexicanos ya no puedan vivir en su país.
¿Y nos asusta el cambio?. ¿Pero qué nos asusta que no lo estemos viviendo ya?
El voto para México tiene que venir de la razón valiente y no del miedo del agachado. El voto debe de relacionarse con la propuesta y el deseo de que ésta se haga. Con la confianza del que pueda llevarla a cabo.
Tengo que apostar para ganar, tengo que jugármela por mi país.
Tengo que llamar al joven que aún vive dentro de mí y dejar de ser yo el peligro para México.