El dilema

Llegó la hora de la verdad para el gobierno de Enrique Peña Nieto.

Después de lo de ayer, lo más probable es que se radicalicen aun más las acciones de los miles de maestros oaxaqueños que tomaron el control de muchas calles y avenidas del Distrito Federal para poner en jaque al gobierno federal.

Y es que cada día está más claro que los maestros de Oaxaca no fueron al Distrito Federal solamente para protestar en contra las reformas a las leyes secundarias en materia educativa, sino para poner al gobierno federal contra la espada y la pared.

Redes de Poder Redes de Poder Publicado el
Comparte esta nota

Llegó la hora de la verdad para el gobierno de Enrique Peña Nieto.

Después de lo de ayer, lo más probable es que se radicalicen aun más las acciones de los miles de maestros oaxaqueños que tomaron el control de muchas calles y avenidas del Distrito Federal para poner en jaque al gobierno federal.

Y es que cada día está más claro que los maestros de Oaxaca no fueron al Distrito Federal solamente para protestar en contra las reformas a las leyes secundarias en materia educativa, sino para poner al gobierno federal contra la espada y la pared.

Si el gobierno utiliza la fuerza pública, malo. Y si no la utiliza, también.

Si en el 2006 la violencia en las calles de la capital de Oaxaca llamó la atención mundial, no es difícil imaginar lo que sucedería si esas mismas escenas se volvieran a presentar en las principales calles y avenidas del Distrito Federal.

Ahora que si el gobierno mantiene una política de resistencia pacífica y empieza a ceder, como ya lo hicieron ayer los diputados, se estaría enviando la señal de que la protesta violenta reditúa.

Por lo pronto, el movimiento Yosoy132 anunció ayer que se unirá a la protesta, en tanto que la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Aleida Alavaez se quejó de que ni a ella, ni a la bancada del PRD les notificaron el cambio de sede, por lo que la convocatoria, dicen, fue ilegal.

La excusa de Luis Videgaray

El secretario de Hacienda, Luis Videgaray, no tuvo más remedio que salir a dar la cara ante la noticia de que el crecimiento económico del país será apenas de un 50 por ciento de lo que había anunciado el nuevo gobierno.

Como era de esperarse, Videgaray no asumió ninguna responsabilidad de lo ocurrido, y le echó la culpa al entorno internacional.

Según el secretario, ya se esperaba que el PIB en el 2013, no creciera como en el 2012, pero lo que nunca imaginó el gobierno, ni los analistas internacionales, fue que la desaceleración económica mundial fuera mayor de lo que se esperaba.

Reculó Felipe Calderón

No obstante que su participación estaba súper confirmada, Felipe Calderón anunció que no asistirá el viernes a la sede del PAN a dictar su conferencia.

En 115 caracteres, contando los espacios, escribió en su Twitter:

“Lamento mucho no poder asistir al evento de la Organización Demócrata de Centro de América, como era mi intención. Envío un saludo fraterno”.

Síguenos en Google News para estar al día
Salir de la versión móvil