La investigación por los sobornos pagados por Walmart y el caso de los permisos otorgados en San Pedro, durante la administración del ex alcalde Fernando Margáin, no es un tema muerto.
Cada día aparecen nuevos elementos que ponen bajo sospecha la actuación del vocero en Nuevo León de la campaña de Josefina Vázquez Mota, quien sigue con el cuento de que él no estuvo enterado de la expedición de estos permisos.
Hace dos meses Reporte Indigo puso al descubierto una red de abogados vinculados a Fernando Margáin, que operó para que esta empresa consiguiera los permisos de uso de suelo que necesitaba para instalarse en Gómez Morín.
En el reportaje se confirmó que la intervención de Antonio Rojas Esquivel y Eduardo Javier Elías Gallardo, abogados cercanos a Fernando Margáin, fue crucial para que el Municipio de San Pedro liberara los polémicos permisos en el 2009.
En los últimos días el periódico Milenio retomó el tema de los abogados ligados a Margáin y ayer dio a conocer un elemento nuevo a esta investigación.
Según el periódico, Diego Zorrilla Vargas, agente de bienes raíces de la empresa Century 21, fue el corredor inmobiliario que estuvo a cargo de esta operación de compra venta del terreno.
Zorrilla Vargas no sólo es familiar de los propietarios originales de este terreno, sino que está casado con Cristina Sada, hermana de Alejandra Sada, esposa de Fernando Margáin y actual candidata del PAN al Senado.
El corredor por lo tanto es concuño de Fernando Margáin.
¿Seguirá “El Tapado” alegando que desconocía el asunto de los permisos que entregó su administración a Walmart?
La decepción de las campañas
El día de ayer concluyeron las campañas en México y en Nuevo León (gracias a Dios) y el sabor que deja la contienda electoral entre los miles de electores es de amargura y de decepción.
La verdad es que en estos dos meses de campaña local se impuso la guerra sucia y las descalificaciones por encima de las propuestas.
La opacidad de los candidatos predominó sobre la rendición de cuentas y la transparencia de los aspirantes a cualquier cargo de elección popular.
Definitivamente ésta no fue una campaña de altura, sino una de alcantarilla, donde el juego sucio se consagró como la mejor de las estrategias empleadas por los equipos de los candidatos.
De delegado de Profeco a ‘guarro’ de Josefina
Muy trabajador y ajetreado se le vio el martes al delegado en Nuevo León de la Profeco, Alejandro Herrera, durante el mitin de cierre que tuvo en la Explanada de los Héroes la aspirante presidencial panista Josefina Vázquez Mota.
Pero el funcionario federal no andaba en cuestiones propias de su cargo, por el cual se le paga y muy bien, sino coordinando el operativo de seguridad y logística para la aspirante panista.
Herrera logró estos dos encargos gracias a su padrino el ex alcalde Felipe Cantú, actual diputado federal y operador en la campaña de Josefina Vázquez Mota.
¿Al menos tuvo el decoro y la decencia el señor Herrera de no cobrar el martes como delegado de la Profeco?