Hace una semana un medio local de comunicación mostró un estudio muestral o encuesta donde perfilan distintas configuraciones de personajes de la farándula política, o como ellos lo mencionan, “potenciales aspirantes” rumbo a la senaduría.
Y lo más relevante de este comercial es que la actual titular de la dependencia honorífica “Amar a Nuevo León” es la puntera, con diferentes fórmulas de águilas anaranjadas: dos municipales y dos secretarios, estos al día 9 de junio, fecha en que realizaron este levantamiento vía telefónica para detectar en el electorado las preferencias respecto a los suspirantes a “representar” a nuestro estado; sería fabuloso saber cuántas llamadas fueron rechazadas.
En política todo puede suceder, hasta lo más surreal. Y para evitar el cerco intelectual, esto solo refuerza la tesis de que poca gente sabe las labores y atribuciones de los senadores –si de por sí el desconocimiento colectivo de las funciones de los tres poderes es abismal. Y todos queremos ser libres, todos queremos volar.
Y esto de proponer duplas de personajes: como un panista de la oldschool, anti-foro de Sao Paulo y exgobernador del estado con un actual presidente municipal de mucha experiencia -de los curtidos desde las juventudes priistas. O ¿qué piensa de esta otra? el líder de la bancada albiazul del Congreso local con la también actual coordinadora legislativa pero federal; ambos muy tenaces y con experiencia en esas funciones, al menos la segunda en la senaduría. Sus partidos les han dado todo, ojalá no se muestren desleales. Antagónicos del ayer, amigos por estrategia en el presente. Pregúntese: ¿no hay más perfiles ciudadanos en el estado para senadores? ¿Posibles candidatos? ¿Según quién?
En Nuevo León esta figura siempre ha sido una vacilada; basta recordar los personajes que han representado al estado en las últimas cuatro elecciones; en ese va y viene del loqueron se recuerda la máxima: el primer acto de corrupción es aceptar siquiera la candidatura a un cargo de índole sin tener conocimientos, ni la preparación académica, rematando con la idea errónea o distorsionada del servidor dizque-público que piensa que aprenderá en el camino –Compa, para cuando eso suceda ya se habrá concluido la encomienda. Solo como dato mediano: de eso depende la eficiencia y buena representación del cargo por tres o seis años. No todos se saben la de chambear y las malas elecciones dan por resultado lo que estamos viviendo, con saltos hacia atrás y guerras mediáticas innecesarias, por no decir absurdas.
En temas más sugestivos: el pasado viernes la Junta Local del INE en el estado se armó la presentación del nuevo sistema de consulta histórica; todo resultado y curiosidad electoral desde el 91 estará a disposición de todos; la onda es interesarse en analizar información; desde la medición de lealtad, alternancia y volatilidad entre otras variables, hasta los gráficos, tablas y líneas de tiempo. Se aprecian y deslumbran los datos como una mina de oro en la colonia. también fue de gran impacto para los asistentes el VotoBot, que es una inteligencia artificial que está al servicio para localización de datos y ayuda en la navegación del sitio del Instituto.
Un ejemplo de dato destacable y gratuito como muchos más del portal es: en México del año 1991 se tenían registrados a 36.7 millones de electores y para el 2021 ya éramos 93.5 millones credencializados. También en los años en que solo se eligen cargos a diputados federales hay menor interés por participar que en las elecciones presidenciales. Obviamente a razón de la efervescencia la “sucesión presidencial” provoca más júbilo, sensaciones mixtas e interés en votar.
Otro más es que las mujeres electoras de zonas rurales son las que más participan en las elecciones, algo que entusiasma es que hay maneras de profundizar en el conocimiento político, la estadística como rama de la matemática es maravillosa en todo este ecosistema.
Una ponente de este evento mencionó una línea con un tono de voz muy sutil y avasallante que estremeció a más de uno. “En el número es la manera más simbólica que describe y transforma lo que hay en nuestro universo. Y añade: filosofía matemática; el deber que cumple, valida y es confiable siempre, sigue el método científico –No hay hilos negros, ni gurús, ni magos camaradas. Mera ciencia y basta.
Si no nos interesamos en hacer crítica, investigación y análisis, entonces no estemos de quejumbrosos de que el gobierno no funciona, como la Constitución Política del Estado y la Ley Orgánica de la Administración Pública lo señalan. Los chismes, rumorología, asegunes, grillas, dimes y diretes, salen sobrando, no los multipliquemos ni con los amigos ni mucho menos en las redes, de eso ya hay demasiado.
En el 76 se lanzó internacionalmente esta inspiracional rola; películas, series, comerciales y hasta caricaturas han utilizado extractos de esta poderosa oda. Fly Like An Eagle tiene un fuerte, estimulante y delicado sentimiento de lograr acciones extraordinarias. Como Steve Miller Band en el que esta canción llegó justo cuando estaba en la cima del éxito musical. Incluso cuando formó su banda haciía dupla con el mismísimo Bob Scaggs. Esos sí que eran duetazos.
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