La volatilidad en los mercados europeos parece no tener tregua. Duró solo unos días el moderado optimismo con el que habían recibido la noticia de una ronda de estímulos monetarios por parte del Banco Central Europeo (BCE) y ahora se ven menguados por las elecciones en Grecia.
A menudo Syriza, el partido ganador de la elección griega, se le coloca en el ala radical de la izquierda. Su agenda de gobierno tiene un eje rector que es el abandono de las políticas de austeridad que siguieron sus antecesores.
En los mercados hay nerviosismo, sobre todo por las posturas encontradas entre el paquete de medidas de austeridad fiscal recomendados por la troika (la Comisión Europea, el BCE y el Fondo Monetario Internacional) y por la agenda de la coalición ganadora del parlamento griego.
Dicho todo lo anterior, el hombre del momento en Europa es el profesor Yanis Varoufakis. El Dr. Varoufakis, ahora también conocido como el Dr. Doom, será el ministro de finanzas del nuevo parlamento de Grecia.
Varoufakis es un personaje atractivo para los medios, no solo por su cargo o por sus ideas, sino también por su manejo de la información. Es provocador, desenvuelto, no parece tener empacho en decir lo que piensa y, por si fuera poco, tiene buen dominio de las redes sociales.
El ministro se define a sí mismo como un “marxista libertario” alegando que cree en las libertades personales y económicas, pero comparte varios preceptos del marxismo. Otra curiosidad es que posee tanto la nacionalidad griega como la australiana.
En cuanto preparación, Voroufakis parece tener todas las credenciales. Además de su doctorado por la Universidad de Essex en Inglaterra, el nuevo ministro de finanzas ha sido catedrático de diversos departamentos de economía en Grecia, Australia, Inglaterra y Estados Unidos.
Aunque muchos lo tildan de ser un lego, un no-profesional, en cuanto a política se refiere y lo acusan de ser demasiado académico, Voroufakis dice tener lo que se necesita para ocupar su nuevo cargo.
Lo que pone a temblar a los mercados son sus ideas. El Dr. Doom ha dicho que Grecia debería declararse en moratoria ya que los planes de austeridad solo han traído malestar a la población griega.
Voroufakis, menciona que la entrada de Grecia al euro fue un error, pero que ahora que están dentro deben de encontrar una salida para permanecer en él, sin tener que adoptar el programa de austeridad propuesto por la troika.
Usando una cita muy aguda, el ministro dijo que el euro era como aquel verso de la canción Hotel California que dice: “Puedes registrar tu entrada en cualquier momento, pero nunca podrás irte”.
La analogía resulta afortunada ya que una eventual salida de Grecia causaría una turbulencia económica dentro y fuera de la Zona Euro, pero sobre todo un caos económico en la nación helénica, con secuelas muy profundas.
Lo cierto es que en la medida que Voroufakis y el nuevo gobierno de coalición encuentren la voluntad política en su país, para llevar a cabo su plan de gobierno, pueden complicarle su actuar a la troika.
Es complicado que la victoria de Syriza por sí sola lleve a la desintegración del euro. Sin embargo si el programa de estímulos puesto en marcha, no va acompañado de políticas domésticas congruentes y no llega a buen fin pronto; los opositores al euro irán ganando terreno.