Pelea poco emocionante y hasta deslucida por ratos la del Sábado pasado allá en la Arena T MOBILE de Las Vegas convertida, una vez más, en la Fortaleza de SAUL “CANELO “ALVAREZ, que se alza con la victoria sobre “DJ”, Daniel Jacobs, en un combate complicado para seguir, en el que abundaron los movimientos estratégicos de las esquinas y los peleadores, cambios constantes de táctica de cada uno con la consabida respuesta del rival, más que precavidos ambos dejan de lado el asumir riesgos, pocos intercambios de metralla que es lo que levanta y enciende a la gente, parecía que iban sumando de punto en punto y no de round por round, hay quien lo compara con una partida de Ajedrez sobre un ring de boxeo, ambos peleadores subieron con una preparación excelente avalados por el seguimiento previo desde meses antes por parte del Consejo Mundial de Boxeo y los otros Organismos de menor calado.
NI ERRORES NI CASUALIDADES
Nada se dejó al azar, ni siquiera el Millón de Dólares que Daniel Jacobs pagó al “Canelo” por subir al ring con un sobrepeso en el llamado “rebote”, después del pesaje oficial del Viernes en el que ambos dieron las 160 libras en que se pactó la pelea, para lo que se deshidrataron ambos hasta alcanzar esa cifra en la báscula para después recuperar hidratación y comer en serio, pero con medida, para recuperar energía para la pelea, ese “rebote” llega a ser hasta de casi 5 kilos en solo 24 horas, muchas funciones así lo dejan, en esta no fue así, se pactó un segundo pesaje extraoficial con fines solo de limitar los kilos para la hora buena, el que rebasara las 170 libras tendría que cubrir esa sanción, la esquina de Jacobs lo sabía y lo tenía presupuestado, el “Equipo Canelo” también sabía no solo que la chequera engrosaría sino que Jacobs tendría más tonelaje recuperando su fuerza natural, todo fríamente calculado, ya durante la pelea ambos se cuidaron de no abrirse de más, de adaptar estrategias, de no asumir riesgos innecesarios, de sumar punto a punto y si por ahí aparecía “ese” error que nunca llegó de ninguno de los dos lados tirarse con todo.
SIN EMOCIÓN
Tanto “Ajedrez” nos entregó una pelea sumamente pareja pero pagó factura en la falta de emoción, ingrediente indispensable en el Boxeo, con el público en la arena que se divirtió a su manera y con los millones que pagaron el “Pay per View”, más los millones que tuvimos la ventaja de verla por la TV Abierta en México.
Pelea contrastante con las dos apasionantes “Canelo – Golovkin”, o los que sin conocer a Jacobs esperaban una paliza como la que le pegó “Canelo” a JC Chavez Junior, ni uno ni otro extremo, esta vez la pelea se quedó atorada, lejos de las emociones y por esto cae al lado de las decepciones, principalmente de los millones de aficionados ocasionales que son los que hacen números grandes en estas funciones. Así las cosas pues, una vez más gana el “Canelo”, pierde en esta ocasión el espectáculo… así de fácil…
