Déjenlo ser

Javier es uno de los mejores comunicadores de medios digitales en nuestro país. Su estilo es único. 

Solórzano es periodista hecho, en primera instancia en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, además cuenta con estudios en la Universidad Iberoamericana, también fue docente de la carrera de comunicación en la Universidad Autónoma Metropolitana. 

Juan Carlos Altamirano Juan Carlos Altamirano Publicado el
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Javier es uno de los mejores comunicadores de medios digitales en nuestro país. Su estilo es único. 

Solórzano es periodista hecho, en primera instancia en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, además cuenta con estudios en la Universidad Iberoamericana, también fue docente de la carrera de comunicación en la Universidad Autónoma Metropolitana. 

El presentador tiene ya 30 años en medios de comunicación. Su historia profesional se remonta a la década de los 80, en los estudios de lo que fuera Imevisión (Instituto Mexicano de la Televisión), cuando fue elegido para conducir un par de programas que sirvieron como antesala para llegar a su primer noticiero.

Fue precisamente el segmento de noticias de la mañana, que condujo junto con Carmen Aristegui –mancuerna periodística brillante desde un inicio y que duraría muchos años más–, que Javier empezó a mostrar un estilo distinto al resto de los presentadores. 

Solórzano comenzó a editorializar las notas, es decir, emitía un juicio personal a algunas de la piezas presentadas, en una época en la que casi nadie se atrevía a hacerlo, menos aún en el canal del Gobierno Federal.

El punto no es lo que hacía, sino cómo lo hacía. La forma “platicada” de la nota que imprimía Solórzano Zinser, comenzó a gustar al televidente.

Después de encontrar voz propia, llegaron proyectos como “En blanco y negro” en MVS, “Círculo rojo” en Televisa y de vuelta a noticias en Multivisión, los tres al lado de Aristegui. 

En radio, Javier vivió una buena época en Imagen Informativa con la misma Carmen y Pedro Ferríz de Con, aunque diferencias editoriales con Ferríz los llevaron a un sonado rompimiento de la sociedad que mantuvieron con Grupo Imagen. De este modo, Aristegui y Solórzano pasaron a las filas de W Radio y posteriormente Javier a Radio Trece, relación laboral que terminó en 2011.

Solórzano ha colaborado en varios periódicos, aunque sus trabajos más significativos son la dirección general del malogrado diario El Independiente, y la columna “Apunte”, que publica el diario deportivo Récord, que también se caracteriza por mantener una redacción “casual”, sin dejar de revisar a fondo los acontecimientos de interés.

El periodista nacido en Pachuca, Hidalgo, es un luchador de los medios, su incursión en Internet –a través de video podcast en YouTube– ha sido exitosa, también el trabajo que hace en Ultra Noticias y su papel como director del diario El Nuevo Mexicano, lo demuestran.

Entonces, ¿por qué no está “amarrando” el concepto en Once Noticias? Sencillo, porque el formato es el del caduco “show” de noticias al estilo del “Flash Informativo” con Adal Ramones. Un espacio para lectores de telepromter, no para periodistas.

Javier se ve desfasado del teaser (resumen) y bumpers (adelantos) porque son estruendosos. Se notan equivocaciones de dicción al aire porque tiene que acoplarse a un guión, se ve forzado ante un timing que no es el suyo. 

El productor tiene tarea: encontrar coherencia entre la narrativa de noticias matutina y el sello de Solórzano, que a cuadro, aparenta lo que es, un hombre relajado, sin traje, ni corbata, que intenta dialogar con el televidente. 

Para empezar, nosotros dejaríamos las síntesis noticiosas para una joven compañera que pueda interactuar con Javier y con los usuarios a través de un video chat, lo sentaríamos más tiempo a comentar la nota en modo reposado, obvio con una taza de café al lado. Simplemente lo dejaríamos ser.

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