‘Dead souls’

Hidalgo Neira Hidalgo Neira Publicado el
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Hace 40 años esta misma noche, cuenta la leyenda que Warsaw se despedía de los escenarios en el legendario antro Pip’s Disco en Manchester, que el cuarteto compuesto por Bernard Sumner, Peter Hook y Stephen Morris estaba listo en el escenario, sólo faltaba la voz porque el intérprete no podía pasar al guarro que custodiaba la entrada.

Ian Curtis subió a tiempo y Joy Division nació el 25 de enero de 1978, aunque no logró ni siquiera terminar la tocada porque al poco tiempo se desató un zafarrancho incontrolable en el recinto.

Poco material se tiene en vivo de la agrupación, solamente dos discos de estudio fueron lanzados, sin embargo, la banda marcó al final de la generación X con su oleada post-punk, de donde después nacería New Order.

Para rememorar los años de este ensamble musical existen películas como “24 hour party people” (2002) y “Control” (2007), la cual es una dramatización de la vida de Curtis dirigida por Anton Corbijn, esta última basándose en el libro de quien fuera su esposa Deborah Curtis “Touching from a Distance”.

El mismo año del filme de Corbijn se produjo un documental que fue tras los miembros de la banda inglesa y capturar de manera fidedigna sus testimonios, desenmascarando la vida que llevaba Curtis tras el escenario.

“Joy Division” tuvo su premier en el Festival de Toronto en septiembre del 2007, pero fue estrenado en 2008, marcando un aplauso entre la crítica y los fanáticos del grupo musical, rescatando momentos en video, fotografías de la banda y anécdotas desde antes de que les llegara el éxito.

Las penurias eran tales que en el lugar de ensayo tenían que quemar basura para calentarse ante el inclemente frío, Curtis lidiaba y sufría por sus ataques de epilepsia, además de que era apoyado por su esposa a pesar de sus infidelidades.

Lamentablemente la historia no puede ser cambiada y en el testimonial se aborda claramente como es que ocurre el final de Joy Division: el conjunto estaba en vísperas de hacer su gira por Estados Unidos, Curtis sufría de aerofobia –aunado a su cuadro epiléptico– y estaba por venirse el divorcio de su esposa, por lo que amaneció el 18 de mayo de 1980 colgado en la cocina de su casa.

Cuatro décadas después y la portada de “Unknown pleasures” (1979) sigue apareciendo en playeras, New Order toca algunos éxitos en vivo para recordar a Curtis y es claro el legado de la música que dejaron a la posteridad.

Tal vez Ian sigue vigente, porque como bien escribió en la letra de “Dead souls”, la gente lo sigue llamando.

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