No cabe duda que las formas sí cuentan en política, y durante la ceremonia de toma de protesta de Claudia Sheinbaum Pardo, diferencias políticas aparte, la presidenta de la República saludó con cortesía a la presidente del Poder Judicial, la ministra Norma Piña cuando arribó al recinto legislativo de San Lázaro, a diferencia del expresidente Andrés Manuel López Obrador, quien evitó saludarla y la ignoró en todo momento, a pesar de que a su arribo a la Cámara sí saludó a Gerardo Fernández Noroña y a Ifigenia Martínez, presidentes de las Cámaras, quienes se encontraban también en el presidium.
Parece que las diferencias entre ambos sí van más allá del plano meramente político y fueron insalvables hasta el último día del sexenio.
Veremos si la cortesía de Sheinbaum con Piña trasciende lo que fue el acto protocolario de ayer y permite reconducir la relación entre poderes. Será muy importante ante lo que viene para el Poder Judicial.
¿Mal presagio?
El próximo sábado 5 de octubre será la toma de protesta de Clara Brugada como jefa de Gobierno de la Ciudad de México, y Morena podría mostrar su músculo e imponerse para el formato del evento en el Legislativo local.
Nos cuentan que en la Junta de Coordinación Política del Congreso capitalino está la propuesta de que el 5 de octubre solo Clara Brugada de un discurso y que los partidos políticos no den mensajes ni posicionamientos.
Igualmente, sería una sesión exprés como la que tuvo lugar este martes 1 de octubre con la toma de protesta de los 16 alcaldes.
Lo anterior, dicen, despierta preocupación entre la oposición, porque de ser así, se haría un acto unilateral y en el que la única voz que se escucharía sería la de la jefa de Gobierno.
Es importante mencionar que, incluso a nivel federal, durante la sesión de toma de protesta de Claudia Sheinbaum como presidenta, los partidos políticos se posicionaron y emitieron un mensaje.
¿Será que Morena se abre al diálogo o se irán por la vía rápida?