Contra todos…

Los Juegos Paralímpicos nos trajeron una gran figura, el sudafricano Oscar Pistorius, este hombre que desafortunadamente al nacer tuvo un problema congénito en donde de las rodillas para abajo no le crecían las piernas, tuvo que ser amputado y aprendió desde muy pequeño a valerse por sí mismo con prótesis que le iban acomodando. Por supuesto, aquí su madre fue un factor muy importante.

Él jugaba Rugby

Alfredo Domínguez Muro Alfredo Domínguez Muro Publicado el
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Los Juegos Paralímpicos nos trajeron una gran figura, el sudafricano Oscar Pistorius, este hombre que desafortunadamente al nacer tuvo un problema congénito en donde de las rodillas para abajo no le crecían las piernas, tuvo que ser amputado y aprendió desde muy pequeño a valerse por sí mismo con prótesis que le iban acomodando. Por supuesto, aquí su madre fue un factor muy importante.

Él jugaba Rugby

Que es el deporte más popular en Sudáfrica y otros más, hasta que alguien lo lleva al atletismo y consigue la oportunidad de participar, primero en los Juegos Africanos, y así va llegando hasta los Juegos Paralímpicos y cumple su meta.

Sin embargo, Oscar Pistorius en ese golpe emocional quería competir en los Juegos convencionales y consigue por supuesto, en base al desarrollo técnico, unas prótesis que le fabrican en forma experimental para él. 

Son como unas “s” muy estilizadas que se colocan debajo de su rodilla, permitiéndole la flexión, es decir, el movimiento natural del que camina y el que corre. Si usted  lo ve caminar, (yo tuve la oportunidad de verlo con los pants), pensaría que trae prótesis porque camina normal; ahí es cuando trae prótesis convencionales. 

Oscar Pistorius… tenía el reto de competir en los juegos convencionales

Cuando comienza a poner marcas en Sudáfrica en las eliminatorias olímpicas sus compañeros que antes lo apapachaban se convierten en sus principales enemigos y detractores, porque todos querían ese puesto en los 400 metros por Sudáfrica y la Federación Africana, a final de cuentas tienen que ir a los tribunales deportivos y por fin encuentran que la prótesis le daban como un trabajo de amortiguadores y eso además le permitía como un resorte impulsarse más. Al demostrase que no tenía ventajas sobre las piernas convencionales se le autoriza pero ya muy sobre el tiempo, aun así consigue su calificación a los 400 metros. Insisto, sus compañeros se convirtieron en sus principales rivales, incluso hubo algunos a los que él venció que sintieron vergüenza por haber perdido con un atleta paralímpico.

Tuve la oportunidad de estar en el Estadio Olímpico de Londres y el lugar que se me asigno un privilegio, la octava fila, y tuve la oportunidad de verlo, acomodarse, formarse y meterse ganado el primer hit eliminatorio entre los primeros cuatro. Fue emocionante verlo cruzar la meta con esa calificación a semifinales, pero sobre todas las cosas todos en el estadio nos volcamos a aplaudir a Oscar Pistorius y no dejamos de aplaudirle hasta que salió de la pista.

Su límite

Las semifinales de los 400 metros, pero cuantos miles no llegaron a Juegos Olímpicos y cuantos miles que participan en los 400 metros no lo hubieran vencido, pero no ganó las semifinales y eventualmente quedo descalificado. Semanas después impone marcas en 400 metros en los Paralímpicos. Mis respetos Oscar Pistorius,  gran figura de Londres 2012… Así de fácil. 

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