¿Cómo está eso de que SGS, una de las empresas contratadas por Pemex para investigar las causas de la explosión, sea al mismo tiempo una de las que por años ha resultado favorecida con contratos millonarios para certificar sus procesos industriales?
Tampoco deja de resultar extraño y hasta sospechoso que esta empresa realice peritajes en una zona en donde se encuentran los archivos que contienen la documentación relacionada con las operaciones de SGS con Pemex.
Sobre todo, después de que la PGR adujo que la paraestatal no debía ser “juez y parte”, por lo que se debía abstener de permitir el acceso a personal especializado al material “sensible” que se encontraba en la zona afectada por la explosión.
¿Sabrán de qué hablan?
Para acabar de empeorar las cosas, y despertar más dudas que certezas, el vicepresidente de SGS, Brian Dugan, cuatro horas después de su conferencia de prensa, tuvo que salir a aclarar que no dijo lo que dijo.
Y es que lo que Brian Dugan dice que quiso decir que la existencia de gas metano es común en minas y en drenajes de edificios y casas. Aunque dice que no hizo referencia propiamente a los drenajes de la ciudad de México.
¿O sea que el gas metano sí se puede acumular en los drenajes de las ciudades, pero no en los de la Ciudad de México?
Que no fue dedazo
Ante las críticas de que la nominación de Fernando Castro Trenti como candidato del PRI al gobierno de Baja California, fue el producto de un dedazo, el presidente del Tricolor, César Camacho Quiroz negó que hubiera dedazos, porque Castro Trenti hasta ahora solo es “un fuerte aspirante” en un proceso en el que el bajacaliforniano se encuentra a la cabeza.
O sea que serán las “fuerzas vivas”, y los sectores del partido, los que al unísono se habrán de pronunciar en el mismo sentido del “fiel de la balanza” de Los Pinos.
Desde luego, Castro Trenti no tiene la culpa de que se mantengan incólumes las tradiciones modernizadas del Partido.
¿Nada más García Ramírez?
Bueno fuera que los consejeros Leonardo Valdés Zurita y Marco Antonio Baños, así como el titular de la unidad de fiscalización Alfredo Cristalinas, siguieran el ejemplo de Sergio García Ramírez.
Y es que estos funcionarios ya han dado suficientes muestras de que no son las personas idóneas para el puesto.
Y no porque no sepan de cuestiones electorales, sino porque en el desempeño del cargo han acreditado su parcialidad.
Aunque García Ramírez no ha explicado con palabras las causas reales de su renuncia, todo indicar que prefirió conservar el prestigio que tenía como integrante de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos, a pasar como comparsa de Leonardo Valdés Zurita.
Violadores de derechos
El gobierno de Felipe Calderón fue señalado ayer como un violador sistemático de los Derechos Humanos, de acuerdo con el informe presentado por el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez.
En el mismo sentido también se pronunció el presidente de la Comisión de los Derechos Humanos, Raúl Plascencia, en el informe que presentó en Los Pinos en presencia de Enrique Peña Nieto.
Sin embargo, y a pesar de las múltiples evidencias en contra de Calderón y García Luna, todavía no se ve claro que el gobierno de Enrique Peña esté decidido a no permitir que esos delitos continúen impunes.
