Después de la Segunda Guerra Mundial y de que las tropas alemanas firmaran su rendición, los últimos combatientes -entre los que abundaban los niños- fueron obligados por el ejercito danés a desenterrar de sus costas cada una de las bombas que los soldados alemanes habían escondido en la arena.
Cabe señalar que al final del conflicto bélico y una vez asesinados los principales líderes nazis se empezó a reclutar a menores de edad, quienes serían obligados y condenados a pagar por el odio y la destrucción provocada por una Alemania que buscaba el poder y la superioridad.
Considerada como una de las pocas películas que ponen como víctimas a los alemanes, serán Sebastian Schumann, Helmut Morbach, los hermanos Lessner y otros compañeros del batallón, quienes capturados por el ejército danés, se encargarán de desactivar 45 mil de las 2.2 millones de bombas que fueron escondidas a orillas de las costas de Dinamarca.
El premio por desactivar cada bomba escondida en la arena y sobrevivir a los campos minados, será su libertad.
El miedo y las ganas de regresar a casa podrá mantener vivos a unos cuantos, sin embargo, será el hambre, la caída de cada uno de sus compañeros y las crueldades de sus habitantes y el ejercito lo que hará que no todos logren terminar.
Una historia desgarradora que cuestiona la forma en que el país danés hizo pagar a muchos de los niños alemanes que formaban parte de las tropas.
“Land of mine” (Bajo la arena) es un filme del director Martin Zandvliet, que te hará reflexionar sobre los conflictos bélicos, los verdaderos culpables y los inocentes que muchas veces son quienes pagan la factura de odio entre naciones.
Si quieres terminar de conocer la historia, puedes encontrarla en plataformas digitales y ¡sin filas!