El gobierno chino impuso al gobierno mexicano que se le entregue una aclaración en la que se detalle que la revocación del tren México-Querétaro no tuvo que ver con corrupción o falta de transparencia de parte de los empresarios del país asiático.
Esta solicitud oficial tendrá que ser cumplida en los próximos días y fue parte de una serie de acuerdos durante la visita del presidente Enrique Peña Nieto en su gira por China.
Esto además forma parte de la cruzada del presidente Xi Jinping contra la corrupción, en la que se ha llevado tanto a integrantes de su gobierno como a altos jerarcas militares.
Estábamos peor cuando “vivíamos mejor”
¿Qué pensaría el mundo si se enterara que en México no solamente hay 43 normalistas sin ubicar, sino que los números oficiales reportan que desaparecieron más de 20 mil personas durante el sexenio de Felipe Calderón, y otras 80 mil fueron asesinadas?
El mundo debe saber que lo que pasó en Iguala no comenzó hace un mes o dos.
La tragedia de Iguala, Guerrero, empezó cuando menos hace ocho años. Cuando el entonces presidente Felipe Calderón le declaró una guerra sangrienta al narcotráfico sin utilizar la inteligencia.
La quemazón de ayer
Como el gobernador de Guerrero, Rogelio Ortega, renunció de facto a su cargo, “maestros” integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación quemaron tres automóviles frente al Congreso Local, incendiaron las oficinas de la Junta de Conciliación y Arbitraje y las de la Contraloría de la Secretaría de Educación de Guerrero, en Chilpancingo.
En problemas
Al que literalmente se le vino la casa encima fue a Edgardo Flores, quien fuera coordinador de giras de Felipe Calderón y actual director de Asuntos Internos de la Policía Federal. Y está en problemas.
El panista, amigo de Felipe Calderón, tendrá que explicar cómo fue que se pudo construir una enorme mansión en las Lomas de Chapultepec en tan solo 10 años de servicio público en puestos de media tabla en el Gobierno Federal.
El panista empezó con un modesto cargo de asesor del jefe delegacional de la Miguel Hidalgo hasta en el año 2000.
Quienes conocen bien al bajacaliforniano dicen que cuando llegó al Distrito Federal tuvo que compartir un departamento con otro panista porque no tenía para más.