Celuloide: Machetazo al cine (a la esperanza)
De por sí es incipiente la industria fílmica mexicana porque depende casi en su totalidad del Estado, como para seguir con la idea de desaparecer los fideicomisos que ayudan a que existan películas como Museo (2019) y Güeros (2014), de Alonso Ruizpalacios; Los adioses (2017), de Natalia Beristain, y Mexican Gangster (2015), realizada por Juan […]
Hidalgo NeiraDe por sí es incipiente la industria fílmica mexicana porque depende casi en su totalidad del Estado, como para seguir con la idea de desaparecer los fideicomisos que ayudan a que existan películas como Museo (2019) y Güeros (2014), de Alonso Ruizpalacios; Los adioses (2017), de Natalia Beristain, y Mexican Gangster (2015), realizada por Juan Manuel Craviotto, solo por mencionar algunas.
Las alertas están encendidas desde hace meses, los legisladores dicen que “desaparecen la imagen de los fondos, pero los recursos se quedan”, ajá, y ¿quién garantiza eso? Absolutamente NADIE, pareciera que ni siquiera la intervención de Cuarón, Del Toro e Iñárritu sirvió de algo hace meses, cuando en teoría, Mario Delgado prometió no tocar el Fondo de Inversión y Estímulos al Cine, mejor conocido como Fidecine.
Para calmar el fuego, la Secretaría de Cultura promete que, a través del Instituto Mexicano de Cinematografía, se canalizará el dinero para que siga llegando a los realizadores, pues esto se lee como mera promesa partidista, como en los peores años del autoritarismo priista.
A ver, personas de cultura y cinematografía, NECESITAMOS, REQUERIMOS, EXIGIMOS, que el dinero quede asegurado no con palabras ni comunicados, sino con legislaciones puntuales dictadas y publicadas en el Diario Oficial de la Nación, de otra manera, solo se desaparecen los fondos, y no habrá manera de saber si se dispondrán de ellos o no a futuro.
Solo se habla de planes, de que se fomentarán convocatorias, esto no está estructurado, es escribir en una servilleta lo que se tiene contemplado hacer, por lo que, evidentemente, puede pasar el tiempo y entonces nadie se hará cargo ni responsable de que se ejecuten estas ideas de proyectos.
Me quejo, porque al igual que decenas de otros estudiantes de cine o aspirantes a cineastas, también me formé como director, y si en próximos años se carece de tener este dinero para hacer óperas primas, pues entonces somos varios los que nunca podremos hacer nuestra película.
¿Por qué mutilar a la cultura? Y bueno, dicho sea de paso, ¿por qué también machetazo a la ciencia y la tecnología? Somos tantos los creativos, los investigadores, los científicos, los que hemos buscado el alcanzar un bienestar (que tanto pregona la 4T), una oportunidad por destacar y hacer una carrera en estos campos y ahora, ¿cómo lo vamos a lograr?
Burócratas, políticos y oligarcas, se quejan de la fuga de cerebros, pues dense cuenta que a eso nos orillan, a largarnos de este país que nos da la espalda, que nada nos ofrece, que nos arrebata la esperanza de un tiempo ulterior mejor.
Gracias por nada “gobierno de izquierda”, por seguir mancillando a miles de personas en una podredumbre infinita.