El auditor del Estado, Jorge Galván, salió del clóset.
Con un total descaro, el responsable de la Auditoría Superior del Estado está demostrando que llegó a este cargo para bailar al son que le toquen sus “padrinos” del PRI.
No en vano aparecía su nombre en el padrón de militantes del PRI, que él atribuyó a un error.
En una total muestra de antiprofesionalismo y de sumisión absoluta, el auditor pretende incumplir con la ley retrasando la entrega de los informes de la cuenta pública del 2016 que debería de estar publicando esta semana.
O en otras palabras: más tiempo para negociar las cuentas públicas del gobernador Jaime Rodríguez y los alcaldes metropolitanos.
¿Y qué alega el auditor para incumplir con su trabajo?
Exceso de trabajo.
Increíble, pero es cierto.
Es lo que dice la carta que mandó a la Comisión de Vigilancia para pedir una prórroga y poder enviar los informes a finales del mes de noviembre cuando todos los regiomontanos están ya viendo los regalos de Navidad y en la cena de año nuevo.
A diferencia de la Auditoría Superior de la Federación, su contraparte federal, la ASENL es un ente que no fiscaliza. Que no asusta. Que no muerde. Que no investiga. Que no sanciona.
Un ente sumiso a los partidos y ahora, para variar, perezoso.
A nivel federal la ASF tenía una gran justificación para no entregar la segunda parte del informe de la cuenta pública del 2016.
En la Ciudad de México hubo un terremoto.
Pero ni eso le impidió presentar la semana pasada sus auditorías.
En cambio la Auditoría Superior de Nuevo León sólo confirmó que sus intereses no son los de los ciudadanos y que sólo son parte del reparto de este show llamado Nuevo León.
Exalcalde involucrado en #ParadisePapers
La investigación de los #ParadisePapers exhibirá pronto a un exalcalde de Nuevo León y su secreto en un paraíso fiscal.
En los próximos días el nombre de este exedil aparecerá en esta investigación del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación que puso al descubierto una nueva red de offshores utilizada por políticos, empresarios y hasta artistas.
No hay duda que este escándalo pondrá fin a sus aspiraciones políticas por ser postulado nuevamente para una alcaldía de este estado.
Intercambio de barajitas en Congreso
En el Congreso de Nuevo León hubo intercambio de barajitas que involucran a personajes de medio pelo.
El exalcalde de Guadalupe, el cetemista José Juan Guajardo, fue nombrado como director del Centro de Estudios Legislativos.
El exdiputado –que estaba cobrando como director de Deportes en Guadalupe- relevó en este cargo al panista Ricardo Lavín, quien era una posición de la presidenta del Congreso, Karina Barrón.
La esposa de Lavín es la suplente de Barrón y en enero llegará al Congreso cuando la independiente pida licencia para buscar un cargo de elección popular.
En los cambios en el Congreso local hasta el coordinador de los diputados del PRI, Marco González, perdió a su asistente, que ahora estará en la nómina del alcalde de Guadalupe, Francisco Cienfuegos.