Aquí el rival es lo de menos

Y sí, no es ni España ni Brasil ni Italia, es ante este Canadá tan limitado y hasta inocente, pero son los goles y es el triunfo que nada más no aparecían por ningún lado y que nos debe comenzar a sacudir los changos que desde enero cargamos en la espalda.

MUCHO RUIDO, NADA DE ÓPERA

Alfredo Domínguez Muro Alfredo Domínguez Muro Publicado el
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Y sí, no es ni España ni Brasil ni Italia, es ante este Canadá tan limitado y hasta inocente, pero son los goles y es el triunfo que nada más no aparecían por ningún lado y que nos debe comenzar a sacudir los changos que desde enero cargamos en la espalda.

MUCHO RUIDO, NADA DE ÓPERA

Los nuestros arrancan  tratando de sorprender a lo canadienses con un ritmo frenético, volcándose sobre el área rival en busca de “ESE” gol oportuno, el que da seguridad y tranquilidad que se nos ha negado a lo largo del verano tormentoso que venimos padeciendo, en contraste con los dos veranos anteriores en los que nos comíamos la lumbre a puños, pero esto es el 2013, es la Copa Oro y es este grupo de jugadores alternos que viven, ojalá estén concientes todos ellos, pies en la tierra,  “SU” momento estelar con el Tri, quizá para la gran mayoría de ellos “SU” único momento con la camiseta nacional. De ahí  la motivación que seguramente “Chepo” y su gente les han tratado de imbuir.

Nuestro Tri ataca con Aldrete por izquierda y Miguel Layún por derecha, haciendo tándem exitoso con Luis Montes. Sin embargo esas llegadas vuelven a estrellarse en ese penúltimo pase que no alcanza a concretar en esas llegadas de peligro que nada más no aparecen, así avanza el reloj, una y otra vez se dan esas llegadas que se pierden en nada, por ahí los de Canadá sorprenden con una descolgada que resuelve con seguridad Jonathan Orozco, el tiempo sigue avanzando con una rapidez que desespera, no solo a los nuestros en la cancha, sino a los mas de 50 mil paisanos que apoyan sin cuestión al Tri de todos nosotros, “Chepo”, el “Flaco” y “Chava” de pie comiéndose las uñas hasta que, por fin…

RAÚL JIMÉNEZ, DE ESTRENO

Sin duda el goleador surgido de la cantera americanista recordará éste como su gol más valioso. Es su primero con el Tri, pero más que eso, el gol que nos sacude los changos que cargamos en la espalda desde enero, cuando al Tri se le fue la inspiración y la seguridad. Por primera vez en mucho tiempo el equipo mexicano se pone arriba en el marcador con la oportunidad de dominar la escena, gol histórico para Raul por ser el primero y por el momento en que lo logra, y  lo hace con gran oficio al dejarse venir desde atrás para conectar con seguridad ese certero cabezazo, dándole dirección al ángulo superior izquierdo de la cabaña canadiense en un centro de córner de Marco Fabián,  que “Chatón” prolonga y que el del América rubrica. Es un gol de más oro que la Copa Oro, conste, ante un rival limitado y hasta inocentón, pero eso es lo de menos, es un gol que rompe una malaria que se nos ha pegado desde el arranque de este 2013.

A los 56’ ya con el dominio no solo territorial sino con la seguridad que solo el gol a favor te puede dar, se da una de las pocas jugadas verticales de los nuestros que deja a Marco Fabián solo en la entrada del área, siente el contacto del defensa rival y se deja caer provocando penal que el propio Marco cobra con maestría y soltando ese segundo grito de gol que traíamos atorado desde hace meses.

JONATHAN, MIGUEL LAYÚN, ALDRETE, LUIS MONTES, RAUL JIMENEZ …

Son los que con su actuación levantan la mano, pintándose la cara de tricolor para mantenerse ahí en la mente de “Chepo”, los laterales americanistas no solo fueron y vinieron todo el juego, sino que lo hicieron con certeza, cierto, Canadá les daba más libre tránsito que al Metrobús, pero de todas maneras hay que hacerlo. Luis Montes, el más activo en media cancha y a Raúl hay que darle el mérito del gol mas oportuno. Jonathan se pone de tu a tu con Chuy Corona, Memo Ochoa y Alfredo Talavera en la única posición en donde no tenemos problema.

Así las cosas pues, finalmente nos llega la victoria sólida y sin angustia que tanto nos hacía falta y conste, era tan necesaria, tan urgente, tan esperada, tan anhelada, que el rival, ahora sí es lo de menos… Así de fácil.

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