Apunte sobre el Seminario Internacional de las Izquierdas

En días pasados, para ser exacto 5, 6, y 7 de este caótico octubre, se celebró la edición 27 del Seminario Internacional “Los Partidos y una Nueva Sociedad” donde confluyen las izquierdas de las izquierdas de la américas latinas posteriores a la Guerra Fría. Organizado y lidereado por el único partido de verdadera ideología en México. Asistieron líderes actuales e históricos, representantes y académicos de más de 100 organizaciones, movimientos y partidos políticos de al menos 25 países, para reafirmar que el Partido del Trabajo es el referente que congrega año con año a las Izquierdas de todo el mundo. Porque vaya que esta labor interrumpida por 27 años es la auténtica fuerza del brazo rojo ante el imperialismo rancio y caduco que está llevando al precipicio las economías de muchos países, sometidos y bloqueados por los vecinos del norte con sus grandes cantidades de egocentrismo y decrecimiento, sin humanismo, con una intolerancia al progreso democrático, igualitario e incluyente para todos sus ciudadanos.

Tantas voces y conceptos fueron reaprendidos, reenfocados por grandes oradores y filósofos que se dieron cita para charlar y refrendar las ideas más vanguardistas, denuncias y críticas enfocadas en pro de un futuro mejor… Porque siempre es posible. Solo es cuestión de voluntad política y estos son foros de gran apertura para todas las posturas y opiniones, donde caben desde los rosas pálidos hasta los rojos púrpura. La onda es ser crítico y contestatario, como Viktor Tsoi, un fenomenal músico señalado como antisistema y líder de la banda Кино de la extinta Unión Soviética de los 80s.

Entre las reflexiones, la mente vuela y fascina lo que quizá sabemos, pero nunca lo ponemos en práctica, no vemos más allá de nuestras narices, por prejuiciosos o por apáticos, de los fenómenos político-sociales que se presentan en los países menos desarrollados.

No se pretende convencer, ni criticar a nadie con estas líneas… pero es inevitable esbozar y no invitar a reflexionar acerca de los acontecimientos reales versus las datas obtenidas por las agencias mediáticas en favor del dinero, el engaño, la censura y la manipulación de conciencias para mantenernos imbéciles e ignorantes. Agachones y cobardes. Inmóviles e incapaces.

Entender que todo consiste en teorizar, de otra forma no se avanza, comprender que justo en este momento el planeta atraviesa por una policrisis mundial: climática, geopolítica, educativa, alimentaria, migrante, contaminante y recursos naturales agotándose a una velocidad nunca vista. Entonces está de más, pero ¿qué hacemos al respecto?

Es de extrema urgencia aceptar que necesitamos un nuevo modelo económico, competitivo y vanguardista donde la salud y la educación sean las bases plurales más firmes para el desarrollo social y económico de cualquier nación.

Una restructuración, una reanudación, un replanteamiento del modelo socialista, pero con las peculiaridades chinas, tipo las ondas de los países nórdicos y asiáticos, pero sin los vicios y errores de los latinoamericanos. También sin la corrupción de los imperios y monopolios encimados en la destrucción masiva de la conciencia humana y la sagrada Pachamama.

El éxito de la modernización de China no es algo que se haya dado por naturaleza o por sí mismo, sino que todo se ha llevado a través de etapas en la que las estrategias han estado enfocadas en la colaboración mutua y el desarrollo pacífico, en donde el progreso sea la meta nacional.

China con su moderno modelo demuestra un nuevo panorama de gobernanzas de disfrute y construcción social, que, con la disciplina, planeación, esfuerzo colectivo, lucha, perseverancia, paciencia, fraternidad, inversión bipartitas y sobre todo amor por la comunidad, estos peldaños al cien se acercan al éxito nacional.

También es destacable la importancia de crear una plataforma para la comunicación, conocimiento mutuo, amistad, ideología, velar por la prosperidad común, un desarrollo pacífico donde se honra la tradición de lucha. Donde prevalezca la cordura, el respeto al intercambio de ideas a pesar de las que son contrarias a las nuestras.

Y ya hay fechas para el 2024 y los temas más destacables para la edición 28 son: nuevas derechas, neofascismo y militarización; migraciones, crimen organizado y trata de personas; inteligencias artificiales y digitalización; nuevas alternativas para las naciones de los gobiernos progresistas; estrategias territoriales ambientales y participativas para enfrentar la crisis climática; la desdolarización y un nuevo sistema financiero internacional; fortalecimiento de los movimientos sociales, autonomías y resolución de conflictos históricos.

En sí la reflexión que más ha girado en la cabeza es que este seminario es un escenario surrealista que te transporta a los acontecimientos… que quizá nunca se escuchan, pero allí están.

En palabras del anfitrión, ideólogo y crisol de estos seminarios –el Profe Beto Anaya, como le gusta ser llamado– menciona que: “Desde la izquierda levantaremos nuestras propias propuestas, nuestros propios paradigmas revolucionarios, nuestra propia concepción de democracia y nuestra propia visión del ejercicio del poder en manos del pueblo”, resaltando que “en el ejercicio del debate, los desafíos, serán constantes”… Si no, cuál sería el chiste del progreso.

A cuidarnos de no tomar malas decisiones, estamos a un año del desafío político más controversial que apestará al menos las próximas dos décadas. Podríamos quedar en ruinas.

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