México no produce aluminio, pero cuenta con algunas de las plantas productivas más grandes del mundo en diferentes industrias como la automotriz, construcción y aeronáutica. Esto es debido al bajo costo de la mano de obra y a la excelente calidad de sus productos, una combinación muy apreciada en estos rubros.
La industria de aluminio en México ya es un sector estratégico en el país. Solamente las exportaciones de autopartes de aluminio (motores y accesorios automotrices) representaron en 2018 un poco más del 32 por ciento del total de las exportaciones del país con un valor de más de 38 mil millones de dólares.
La ausencia de plantas productivas de aluminio primario se debe a que la falta de alúmina y los costos de producción (fuertes consumos de energía eléctrica), no lo vuelve atractivo para la inversión. Es por ello, que el mercado nacional se alimenta de aluminio primario importado y de generación y reciclaje de chatarra de aluminio.
En estos tiempos de pandemia, la industria del aluminio tuvo una recuperación acelerada y no solo eso, sino que fue mayor la demanda a la presupuestada para 2020 sin pandemia
El reciclaje de aluminio en México se ha convertido en una de las industrias más competitivas del país debido a la misma ausencia de productores o smelters. Al no existir estos, se hace indispensable para el país tener un sector de reciclaje sumamente sólido para suplir este faltante. Esto lejos de ser una limitante para el desarrollo de la industria, para nosotros es una gran propuesta de valor ya que en estos tiempos es de suma importancia ser una empresa sustentable, comprometida con la economía circular y generando energías alternativas no contaminantes.
Los grandes consumidores de aluminio en el mundo están dando preferencia a los productores que usamos aluminio reciclado en nuestros procesos, ya que no existe aluminio más verde que el reciclado.
El aluminio reciclado requiere un 95 por ciento menos de energía que el aluminio primario para su producción.
En México el reciclaje de aluminio es de las industrias que por naturaleza se hace cada vez más fuerte, aunado a ello, si la presentación es en aluminio líquido se incrementa el ahorro en energía ya que este no requiere un segundo proceso de fundición.
Al reciclar producimos una aleación de aluminio muy cercana a las especificaciones químicas de las necesidades de cada empresa, esto hace que el insumo sea más económico, por lo que es muy peleada por todos los productores de aleaciones de aluminio. En México se recicla el 99 por ciento del aluminio que se desecha, siendo este y el cobre los metales con los más altos porcentajes de recuperación.
Así es como la industria del reciclaje cada vez toma más valor en los procesos productivos.
¿Cómo impulsar la industria del aluminio y con ello fortalecer la economía?
Un gran primer paso puede ser comenzar con políticas públicas del tipo compensatorias (antidumping) contra los productos que su precio de venta sea menor que su costo de producción, ya que algunos países ofrecen rebates o benefician a las exportaciones de los mismos. Además, apoyo con leyes que eviten la exportación de chatarra, ya que esta regresa al país como producto terminado o semiterminado, y esto obviamente se refleja en lo económico, repercutiendo así en la creación de nuevos empleos en México.
