¿Alguna vez has jugado al teléfono descompuesto? Entonces, ¿Entenderías si te digo que casi toda la información que ha llegado a ti desde que naciste está distorsionada?
Gerardo Shmedling aseveró en alguna ocasión que la alquimia del pensamiento es una transmutación interior, que a diferencia de la química es un proceso 100 por ciento espiritual.
Si el pensamiento es el mensajero de la creación entonces el hecho de que hoy estés aquí, seas quien eres y tengas lo que tienes es sólo producto de un pensamiento o varios que algún día tuviste.
Si no estás conforme, significa que tus pensamientos no fueron los adecuados y es tan fácil cambiar lo que experimentas hoy, con solo cambiar tu forma de ver las cosas eligiendo con mayor conciencia tus pensamientos.
La mente jamás deja de trabajar, siempre estamos pensando, pero no significa que estamos pensando con sabiduría, casi siempre lo hacemos en automático y por eso nuestra mente está contaminada de información falsa.
Solo el 10 por ciento de nuestros pensamientos son propios, lo que significa que el 90 por ciento restante viene de información aprendida tergiversada.
Necesitamos transformar la información de la mente depurando la información falsa y aprendiendo a crear pensamientos de amor puro.
La forma de descubrir la información verdadera es muy sencilla:
Toda información va a generar un resultado correspondiente a la que la origina.
Cuando tienes resultados no deseados entonces la información es falsa con respecto al propósito que tenías.
Introduce en tu mente información que te ayude a generar el resultado que quieres obtener, eso es la alquimia.
Es importante que no crean nada de lo que les digan hasta que ustedes lo verifiquen.
Cualquier información que llegue a tu mente y no haya sido verificada por ti es una creencia y no nos interesa tener creencias sino verdades.
Cuando la mente se llena de información verdadera, es totalmente liberadora porque nos hacemos libres de sufrimiento, dolor, angustia y miedo.
Por ejemplo: en nuestra cultura aprendimos que “Sufrir por nuestros seres queridos era Amor”. “Entre más sufro por ti es porque más te quiero”.
El sufrimiento nunca ha sido útil, no compensa nada, no se conecta con la paz ni el bienestar, no tengo que hundirme contigo en el pozo para demostrarte que te amo.
Recuerda que los grandes sueños empiezan en la mente, lo mismo pasa con las grandes ideas, los deseos y todo lo que quieres en tu vida, así que tienes que empezar por pensar adecuadamente si de verdad quieres un cambio.
Si aspiras a cambiar algo en tu vida es necesario que hagas alquimia de pensamiento, si transformamos nuestro sistema de creencias transformamos nuestro destino.