Nina perdió su brazo en el circo. Había un acto donde la obligaban a saltar en medio de un círculo de fuego. Un día, su brazo no pudo esquivar las llamas, se quemó casi por completo y tuvieron que amputarlo para que pudiera sobrevivir.
Conocí a Nina, una hembra de mono araña, hace unas semanas, en un viaje familiar a Costa Rica. Su historia me conmovió mucho y me inspiró a escribir este texto.
Nina vive ahora con Darwin, otro mono araña, en una reserva que se llama Kids Saving the Rainforest.
Somos la especie animal más invasiva y destructora del planeta tierra. Parte de este comportamiento de “especie superior” se debe a nuestra incapacidad de ser empáticos.
Un verdadero emprendedor parte de la empatía: mira un problema en su entorno o una necesidad no cubierta, y construye un modelo de negocio que sea una solución a ese problema y que, además, le deje ganancias para crecer y ser sostenible en el tiempo, con lo cual su solución podrá impactar a más personas.
Lecciones para sobrevivir
Esta empatía por los animales no me surgió de la nada. Esta sensibilización se la debo por completo a mi hijo Daniel, que tiene cuatro años, y es un amante y defensor de la vida animal.
Con esa mirada empática visitamos Costa Rica y aprendimos mucho de los hermanos ticos, cuyo lema “Pura vida” es parte de su cultura, de su manera de vivir y de su marca país. Ellos viven de forma más tranquila, sin tanta prisa ni estrés, como nosotros.
Pero no solo aprendimos de los costarricenses; también cada especie animal que conocimos nos dejó enseñanzas para emprender en este entorno que se parece a una jungla salvaje, donde todo cambia tan rápido, donde no hay certezas y donde, aunque no queramos, somos vulnerables.
Acá te comparto estas 5 lecciones ‘salvajes’ para emprender:
1. Adáptate al cambio como cocodrilo. Adáptate y crea una armadura de cocodrilo ante los ataques de la gente que no cree en tus sueños.
2. Usa tu energía para lo que sí importa como el oso perezoso. Gestiona tu energía en las cosas importantes y no la desperdicies en proyectos, clientes o personas que no valen la pena.
3. Haz equipo equitativo como el mono tití. Si queremos que al emprender haya más equidad y el negocio crezca, no hay de otra: hay que trabajar 50 por ciento y 50 por ciento con nuestra pareja para que ambas partes tenga posibilidad de cumplir sus sueños y crecer.
4. Sé discreto como la rana de ojos rojos. No debes ser arrogante y presuntuoso. Vale más ser discreto y humilde, trabajar duro por tu sueño y dejar que los hechos hablen.
5. Aliméntate de forma sana y variada como la lapa roja. Como hace la lapa, tú debes alimentar tu cuerpo, tu mente y tu espíritu con ‘frutos variados’ que te den energía, alimenten tu creatividad y te hagan cada vez más resiliente ante la adversidad.
Para enfrentar tiempos retadores como emprendedor, no hay más que sacar lo mejor de nosotros cada día. Como dijo alguna vez el gurú Tony Robbins: “Los malos tiempos crean personas fuertes y las personas fuertes crean buenos tiempos.”
Genaro Mejía es periodista de negocios, mentor, consultor y speaker. LinkedIn Top Voices Latam 2019 y fundador de BAR EMPRENDE.