Con el paso de los meses, el régimen de Aleksander Lukashenko, presidente de Bielorrusia, sigue creciendo, pero no por tener rasgos democráticos y transparentes, sino por frenar a la oposición, a las voces que buscan competir con él políticamente. El día de ayer, se dio a conocer que uno de sus excontrincantes presidenciales, Viktor Babariko, fue condenado por el Tribunal Supremo de Bielorrusia a 14 años de prisión por cargos de soborno y blanqueo de capitales, además de inhabilitarlo de cargos públicos por cinco años.
Cuando se dio a conocer la sentencia, Viktor Babariko ya llevaba un año en detención preventiva tras haber sido señalado, junto a uno de sus hijos, de liderar una red criminal que transfería grandes sumas de dinero al extranjero, una acusación que se realizó un mes antes de que se llevaran a cabo las elecciones generales a las cuales se enfrentaría a Lukashenko.
Верховный суд приговорил Виктора Бабарико к 14 годам колонии усиленного режима.
Виктор Бабарико единственным из фигурантов дела Белгазпромбанка не признал вину, потому что ничего противозаконного не совершал. Это в своих речах доказали и адвокаты.
Невиновен! pic.twitter.com/mRcP9QWaUb
— Виктор Бабарико (@viktar_babaryka) July 6, 2021
“No pueden declararme culpable de delitos que no cometí. Sin embargo, puedo decir desde esta jaula que no me avergüenzo de mi vida”, dijo ayer el también exbanquero.
Al difundirse esta noticia, no sólo fueron opositores bielorrusos los que pidieron su libertad, también funcionarios internacionales. Como Peter Stano, portavoz de Asuntos Exteriores de la Unión Europea, quien aseguró que la sentencia de Viktor Babariko fue uno de al menos 125 veredictos “injustos y arbitrarios” dictados recientemente por tribunales bielorrusos sin el debido proceso legal.
“El régimen de Lukashenko viola claramente los derechos humanos internacionales (…) La Unión Europea exige la liberación inmediata e incondicional del señor Babariko, así como de todos los presos políticos, periodistas y personas que se encuentran tras las rejas por ejercer sus derechos fundamentales”, señaló Stano, refiriéndose a las últimas detenciones que se han registrado en Bierlorrusia, como la de Roman Protasevich, un periodista quien fue arrestado en el aeropuerto de Minsk en mayo pasado por incitar disturbios masivos.
Belarus: Sentencing of @viktar_babaryka & other political trials confirm continued violation of international human rights by the regime. 🇪🇺 demands immediate release of all political prisoners & detainees and is ready to consider further measures https://t.co/DfEMhyJvJ8
— Peter Stano (@ExtSpoxEU) July 6, 2021
“Babariko se convirtió en uno de los candidatos que despertaron a nuestro país el año pasado. Quería ver a Bielorrusia como un país justo, equitativo y abierto. El régimen se venga de él de forma espantosa”, compartió.
Ante esto, la maestra Melanie Daniels Vences, académica de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Aragón, opina que, como lo señaló Tijanóvskaya, sí existe una vengaza de por medio, sobre todo si se toma en cuenta que, antes de su detención, Viktor Babariko llegó a tener el respaldo del presiente, algo que cambió en cuanto se postuló a las elecciones.
The regime sentenced 2020 presidential hopeful Viktar Babaryka to 14 years in prison. @viktar_babaryka became one of those who have awakened our country last year. He wanted to see Belarus as a just, fair, open country. The regime takes revenge upon him in a horrifying way. pic.twitter.com/U8XVP6KnsO
— Sviatlana Tsikhanouskaya (@Tsihanouskaya) July 6, 2021
“Es preocupante este encadenamiento de hechos, porque durante el tiempo que estuvo trabajando como banquero, era del gran agrado del gobierno de Lukashenko, pero cuando renunció y se postuló a la presidencia, de repente empezaron a surgir dudas e investigaciones en su contra (…) Creo que al final podríamos ver su sentencia como un mensaje a la oposición de amedrentamiento hacia ellos”, comenta.
Sus contrincantes
Desde que Aleksandr Lukashenko tomó el poder en la década de los 90, no ha habido hasta ahora un contrincante lo bastante fuerte para derrocarlo. Sin embargo, sí podría aparecer un grupo que actúe contra él.
En entrevista, la maestra Daniels Vences comparte que entre los integrantes de ese grupo, sin duda estaría Svetlana Tijanóvskaya, quien hoy en día está exiliada por buscar competir en las elecciones generales, y por ser esposa Serguéi Tijanovski, un bloguero recientemente sentenciado a 15 años de prisión por incitación a protestas masivas en Bielorrusia.
De acuerdo con la académica, Svetlana le podría dar una gran sorpresa al presidente, pues aunque en un inicio aseguró que las mujeres no tenían la fuerza necesaria para dirigir a un país, tras el encarcelamiento de Babariko es ahora ella la principal líder contra el régimen.
Asimismo, asegura que entre el resto de las personas que podrían integrarse a la oposición bielorrusa, están aquellas que utilizan las redes para expresar su desacuerdo con la administración de “uno de los últimos dictadores europeos”.
Bajo esa postura, aún se espera que sean más los gobiernos internacionales los que se sumen a las peticiones de liberar a los presos políticos bielorrusos, incluidos Rusia y China, posiblemente los únicos socios comerciales a los que Aleksandr Lukashenko podría obedecer por el apoyo a su Estado.