La devastadora guerra civil en Siria comienza a adquirir una nueva y peligrosa dimensión.
En respuesta a críticas de que Rusia ataca solamente a adversarios del gobierno sirio, un vocero del presidente Vladimir Putin dijo ayer que las incursiones aéreas rusas atacan a varios grupos además del Estado Islámico en Irak y Siria (ISIS, por sus siglas en inglés)
Rusia realizó el miércoles sus primeras incursiones en Siria, en lo que Putin calificó un ataque preventivo contra las milicias. Según el Ministerio de Defensa ruso, 20 incursiones destruyeron un centro de mando de ISIS y varios depósitos de municiones.
Pero funcionarios de Estados Unidos y otros países sostienen que los rusos aparentemente solo atacaban a los grupos opositores que se enfrentan a las fuerzas del gobierno sirio.
El Observatorio Sirio por los Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, dijo que los ataques del jueves en la provincia central de Hama hicieron blanco en posiciones del grupo rebelde Tajamu Alezzah, respaldado por Estados Unidos, y en la provincia de Idlib, controlada por una coalición de grupos rebeldes.
“Estamos preparados para dichos ataques informativos”, afirmó Putin en una transmisión en vivo desde el Kremlin.
Diferentes objetivos
Washington y Moscú coinciden en la necesidad de combatir a ISIS pero no en cuanto a qué hacer con el presidente Bashar Al Assad. La guerra civil siria, producto de un alzamiento contra Assad, ha causado más de 250 mil muertos desde marzo de 2011 y provocado la fuga de millones de refugiados hacia el Medio Oriente y Europa. (Con información de AP)