Entre la guerra y la paz se debate el presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
El mandatario visitó ayer al Papa Francisco para expresarle su admiración y pedirle que rece por él y su familia, pero un día antes reprendió en Bruselas a los países de la Unión Europea por no aumentar su gasto en defensa militar ante la amenaza de Rusia.
“Estoy preocupado por la reducción en gasto militar en algunos de nuestros socios de la OTAN, nuestra libertad tiene un precio”, expresó el mandatario según Le Monde. “A mediano y largo plazo deberemos examinar si todos contribuyen”.
Sus palabras significaron un recordatorio de que, pese al involucramiento de Estados Unidos para combatir el expansionismo del presidente ruso Vladimir Putin, los líderes europeos deben pagar más por su defensa, publicó el miércoles The Washington Post.
Además, el líder de la Casa Blanca pidió a la OTAN reforzar la estrategia militar en los países de Europa del Este que están más cerca de Rusia, petición que aún se analiza.
El exhorto de Obama recibió críticas de ciudadanos europeos, quienes no ven con buenos ojos el intervencionismo y la actitud bélica del estadounidense.
“¿Alguien cree que Rusia amenaza a España o Alemania? Por favor, estos vienen a vendernos armas creándonos miedos”, expresó Juan Artiñano, lector de El País.
‘Rece por mí’
La actitud armamentista de Obama cambió ayer por una de paz y admiración.
“Por favor, rece por mí y por mi familia”, pidió el presidente al Papa Francisco durante una reunión en el Vaticano en la que también discutieron cómo aliviar la desigualdad.
El político de Washington le regaló a Francisco semillas del jardín de la Casa Blanca, además de externarle una invitación para que vaya a Estados Unidos.
El Pontífice, en respuesta, le regaló su exhortación apostólica “Evangelii Gaudium”, en la que trata temas como la pobreza, la paz y la desigualdad.
“’La leeré en el despacho oval cuando esté frustrado y espero que me calme’, le indicó Obama a Francisco. ‘Eso espero’, respondió el Papa”, reportó El Mundo.
